Seis de los más importantes maratones del mundo anunciaron este martes una nueva financiación del programa antidopaje, dirigido por la Unidad de Integridad del Atletismo (AIU), órgano independiente creado en 2017 por la Federación Internacional de Atletismo (IAAF) para investigar los casos de dopaje.
Los ‘Majors’, asociación que agrupa a seis de los grandes maratones mundiales (Tokio, Boston, Chicago, Nueva York, Berlín y Londres), anunciaron en un comunicado la financiación de un programa antidopaje 'revolucionario' por parte de la AIU, con una 'política de controles basada en las investigaciones y la información'.
La AIU se ocupa desde 2017 de los tests e investigaciones en la lucha contra el dopaje, así como de la corrupción y el fraude en el atletismo mundial.
La participación de los ‘Majors’, cuyo montante exacto no ha sido desvelado, permitirá la contratación de al menos una persona suplementaria y el aumento de los medios de investigación dirigidos hacia los mejores maratonianos del mundo.
'La inversión permite investigar mejor a los maratonianos, con el fin de identificar los corredores en riesgo, establecer un plan de control antidopaje sobre el buen atleta en el buen momento, más que un programa de controles más general', detalló a los medios el director de la AIU Brett Clothier.
El atletismo ha estado marcado en los últimos años por los escándalos de dopaje, especialmente en Rusia, y de corrupción, principalmente el que vincula al expresidente de la IAAF Lamine Diack y a su hijo Papa Massata Diack, antiguo consejero de marketing de la federación.
También en el maratón, con la suspensión por dopaje de dos estrellas kenianas, Rita Jeptoo (tres victorias en Boston, dos en Chicago) y Jemima Sumgong (victoria en Londres y en los Juegos de 2016).
Desde un punto de vista antidopaje, 'el maratón es una prioridad ligada al éxito de las carreras urbanas, que son las pruebas más lucrativas del atletismo mundial, teniendo además un alto riesgo de dopaje', reconoció Clothier.