Con su rostro serio y concentrado, con firmeza en su brazo y en su carácter, José Quintana (12-9) subió a la lomita de los suspiros y acabó la fiesta de los Cerveceros. El lanzador colombiano silenció la ‘guachafita’ de los bateadores de Milwaukee y se acreditó la victoria 6-4 que evitó la barrida sobre los Cachorros, en una serie de tres partidos que concluyó ayer en el Miller Park, en la ciudad más grande en el estado de Wisconsin (Estados Unidos).
La novena de Chicago redondeó su triunfo respaldada en el trabajo monticular de Quintana, que completó doce festejos en la actual temporada de Grandes Ligas, y en los sendos jonrones de Daniel Murphy y Kyle Schwarber.
El zurdo bolivarense de 29 años de edad, solo permitió cinco hits y dos carreras en seis entradas y dos tercios, lo cual fue vital para que los Cachorros celebraran y extendieran a cuatro juegos la ventaja sobre los Cerveceros en el liderato de la División Central de la Liga Nacional.
Era un duelo directo por la lucha por llegar a la postemporada y el serpentinero colombiano no defraudó. Propinó cinco ponches y concedió dos bases por bolas. Empleó 104 lanzamientos, de los cuales 68 resultaron strikes.
El cerrador Pedro Strop salió vivo de una seria amenaza de empate en el noveno episodio y se anotó salvado.
A la ofensiva (los pitchers del Viejo Circuito hacen parte de la lista de bateo), José Quintana se fue de 3-0.