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La Federación Internacional de Fútbol Asociado, Fifa, ‘entró a jugar’ en el escándalo de acaparamiento y reventa de boletas de los partidos de la Selección Colombia en Barranquilla durante la eliminatoria al Mundial Rusia-2018, que viene siendo investigado por la Fiscalía General de la Nación.

Un delegado de la Fifa estará en Colombia recogiendo la información y adelantando pesquisas para empaparse del tema y rendir un informe al Comité de Ética de la Fifa.

'En efecto, hemos tenido contactos con la Fifa y estamos remitiendo al Comité de Ética de la Fifa una copia de la resolución con la cual se formuló pliego de cargos a la Federación Colombiana de Fútbol (FCF) y a su Comité Ejecutivo por el conocido caso de desvío masivo de boletas, con el fin de reventa. También hemos puesto a disposición de ese organismo el expediente que contiene la investigación', confirmó Pablo Felipe Robledo, Superintendente de Industria y Comercio, quien denunció públicamente toda la situación después del partido Colombia-Brasil, donde se hicieron evidentes varias irregularidades.

Así las cosas, los directivos de la FCF tienen la lupa de la justicia colombiana y de la máxima rectora del balompié mundial, que se encuentra en procura de mejorar su imagen y credibilidad después del caso de corrupción llamado Fifagate, que generó la destitución del suizo Joseph Blatter y que tiene tras las rejas a varios dirigentes, entre ellos el que era presidente de la Federación colombiana, Luis Bedoya.

La exmagistrada colombiana María Claudia Rojas, miembro del Comité Ético de la Fifa, se declaró impedida para participar en este proceso por ser muy cercana a dos de los investigados.