El estadounidense Justin Thomas, vigente campeón del torneo, es el máximo favorito a revalidar su título en el Campeonato de la PGA, el último ‘major’ de la temporada, desde hoy, con su compatriota Tiger Woods al acecho.
Thomas, de 25 años y segundo del ranking mundial, disputará la primera ronda en Bellerive, en San Luis (Missouri), junto a Woods y el norirlandés Rory McIlroy, otro de los favoritos.
'Estar en un grupo así te obliga a estar concentrado desde el principio. Va a haber un gran ambiente', señaló McIlroy, quien busca su primera victoria en un ‘major’ desde precisamente el Campeonato de la PGA en 2014.
Woods, por su parte, aspira a hacerse con el último Grand Slam de la temporada ocho meses después de volver a la competición tras ser sometido a una fusión espinal que le mantuvo fuera del circuito durante meses.
‘El Tigre’, ganador de 14 ‘majors’, no levanta un título desde 2013 y su última gran victoria se remonta al Abierto de Estados Unidos en 2008, pero ha recuperado sensaciones en los últimos torneos luego de penar durante cinco años por lesiones en su espalda.
A pesar de eso, el estadounidense sigue buscando recuperar su mejor nivel luego de firmar en junio el cuarto lugar en el Quicken Loans National, su mejor resultado desde su regreso al circuito.
'Ha tenido que aprender de nuevo a desplazarse. Ha debido aprender de nuevo a hacer ‘swings’. Hace 18 meses, este hombre no podía ni siquiera caminar. Volver a este nivel es ya una hazaña excepcional', subrayó McIlroy sobre su rival.
'Si lograra ganar otro ‘major’, sería increíble', agregó el golfista de 29 años.
El torneo contará con 98 de los 100 mejores jugadores del planeta, que se darán cita por última vez en agosto en los ‘greens’ de Bellerive.
Entre ellos estará Jordan Spieth, ganador del Masters, el Abierto Británico y el US Open y que aspira a hacerse con el último ‘major’ que le falta.
De conseguirlo, el estadounidense, octavo del ranking, se uniría a un selecto grupo formado únicamente por Woods, Jack Nicklaus, Gary Player, Ben Hogan y Gene Sarazen.
'Lograr el Grand Slam es un objetivo para mí, por lo que está claro que pensaré en ello pero (no será) nada exagerado', apuntó Spieth.
Los españoles Jon Rahm y Sergio García serán por su parte las esperanzas de su país para brillar en un campo que le va como anillo al dedo al primero.
'Creo que el campo me viene bien, ayuda a jugadores agresivos que le pegan largo. No tenemos que ser tan certeros desde el ‘tee’ porque la bola no rodará y podremos ser más agresivos a banderas más escondidas', reconoció Rahm a la prensa española.
A sus 23 años, el originario de Vizcaya (norte) no ha podido repetir esta temporada las grandes sensaciones que dejó en la pasada y en Bellerive tendrá una gran ocasión para dejar su impronta en un campo que se adapta perfectamente a sus características.
No en vano, Rahm es uno de los mejores pegadores del circuito y el terreno, de más de 6.900 metros con calles anchas, es ideal para poder pegarle a la bola sin la precisión necesaria en otros escenarios.
Tiger jugaría la copa Ryder
Woods, exnúmero uno del mundo de golf, podría jugar la Ryder Cup e incluso ser subcapitán del equipo norteamericano, afirmó ayer su capitán Jim Furyk.
'Es posible que haga las dos cosas. ¿Es la mejor solución para el equipo? Es lo que debemos examinar', declaró Furyk, quien tiene que anunciar en agosto a los cuatro jugadores convocados sin tener en cuenta su posición en el ranking de la PGA.
De otra forma, Woods tendría que alzarse el domingo con el Campeonato de la PGA para tener los puntos suficientes para medirse al combinado europeo a partir del mes que viene.
'Nos es de gran utilidad en los dos papeles. Cuando ha estado en el equipo siempre se ha comportado como un líder. Como jugador, cumple con los dos roles igualmente', añadió Furyk.