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La pesista colombiana Karool Blanco salvó el honor local al enfrascarse en un duelo muy cerrado con las mexicanas Quisia Guicho y Mónica Domínguez y alcanzar, al menos, una de las dos medallas áureas en juego en la tarde de ayer en el coliseo Chelo de Castro en la Universidad del Atlántico, cuando se disputó la categoría de los 58 kilogramos femeninos del levantamiento de pesas.

La antioqueña Blanco se llevó el oro en el arranque al sumar 93 kilogramos y hasta se aventuró en buscar la marca para la categoría en los Juegos Centroamericanos al pedirle a los asistentes de plataforma que le ubicarán discos que sumaran 100 kilos, buscando batir la marca regional, aunque sin éxito.

En la conclusión de la primera modalidad, la colombiana tuvo uno solo movimiento exitoso, el segundo, cuando buscó repetir el poder levantar los 93 kilos logrando hacer estallar en júbilo al pueblo barranquillero que nunca bajó la voz para alentarla.

La pareja mexicana de Guicho y Domínguez intentaron seguirle el paso a Blanco marcando en el tablero 91 y 92 kilogramos respectivamente en sus levantamientos. El duelo tendría un segundo y vibrante asalto por el oro en envión.

El juego de estrategia y presión al rival marcó la pauta durante la segunda sesión, cuando en repetidas ocasiones entre Guicho y Blanco anunciaban un peso a levantar mayor que el de su contrincante buscando cederle el primer lugar en la plataforma y jugar con la ventaja competitiva de saber el resultado de la otra.

La mexicana Guicho anunció 118, la colombiana Blanco hizo lo mismo para igualar su intento; la centroamericana contraatacó con 119, pero la de casa se estacionó en 118 logrando levantar la barra. Acto seguido, Quisia Guicho alzó con dificultad la barra, pero logrando el cometido. El equipo técnico de Colombia, con Orlando Pinilla a la cabeza, anunció 120, lo mismo hizo el equipo de Guicho.

Blanco no pudo hacer el movimiento reglamentario para completar las 120 y con su fallo ya la mexicana Guicho había ganado el oro al haber hecho con éxito los 119 kilos.

Alentada por el fallo de la local, pidió los 124 kilogramos buscando batir la marca centroamericana y lo consiguió sin guardarse ninguna emoción sobre la plataforma en donde brincó como celebrando un gol de México en el Mundial.

Colombia logró el noveno oro de las pesas de los XXIII Juegos Deportivos Centroamericanos, siendo la disciplina que va en la punta defendiendo la dura competencia con los aztecas.