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España debuta en Rusia-2018 contra el Portugal de Cristiano Ronaldo y sacudida por el caso de Julen Lopetegui, este viernes en el Mundial, en el que Uruguay logró un triunfo 1-0 con el último aliento y destronó a los faraones egipcios sin Mohamed Salah.

No fue Edinson Cavani ni Luis Suárez, la letal pareja de atacantes celeste, sino el defensa José María Giménez, que anotó de cabeza al minuto 89 para doblegar por fin la tenaz resistencia defensiva egipcia y sobre todo, de su portero Mohamed Elshenawy, una verdadera muralla.

Parecía que los charrúas se irían de Ekaterimbugo con la frustración por los goles perdidos por Suárez, en dos ocasiones, y Cavani tras un disparo al vertical, pero llegó el cabezazo salvador del defensor de Atlético de Madrid para dar tranquilidad en el inicio del camino de Rusia-2018.

Salah, la estrella egipcia, observó desde el banquillo cómo a su equipo se le escapaba un empate que dejaba bien parado a Egipto para la pelea por un boleto a octavos.

Una triste forma de celebrar su 26 aniversario.

Rusia, tras su contundente 5-0 ante Arabia Saudí en el inicio del Mundial, lidera el Grupo A, seguido por Uruguay, también con tres puntos pero peor saldo anotador. Sin puntos están Egipto (-1 en la diferencia de goles) y Arabia Saudí (-5).

España no cambia

Los españoles, que serán dirigidos por Fernando Hierro tras el cese de Lopetegui después de que se anunciara su fichaje por el Real Madrid, se medirán a Portugal en Sochi desde las 18H00 GMT por el Grupo B.

Tres horas más temprano, Marruecos e Irán abrirán las acciones del Grupo B en San Petersburgo, en un duelo entre los dos 'outsiders' de la serie.

'Es imposible cambiar en estos dos días. Sí se verá la España reconocible, la España que quiere jugar bien, que quiere ser protagonista. Nuestras características las tenemos muy claras', afirmó Hierro, descartando variantes en la forma de jugar de la Roja.

'No vamos a cambiar un ápice nuestras virtudes. La selección lleva jugando muy bien al fútbol mucho tiempo', añadió el malagueño.

Pese al terremoto que causó la salida de Lopetegui, en Portugal no se fían de que España esté en crisis.

'España tiene su estilo desde hace una década, no creo que haya ninguna sorpresa', afirmó el seleccionador Fernando Santos. Es ese estilo el que la llevó a ganar dos Eurocopas (2008 y 2012) y un Mundial (2010) en cuatro años.

Pero Santos se tiene confianza. De hecho, Portugal es el vigente campeón europeo tras dar el batacazo contra la local Francia hace dos años en la final continental. 

Y además tiene a Cristiano Ronaldo. 'Cristiano es un capitán extraordinario y un jugador decisivo, tanto dentro como fuera del campo. Pero más importante que él o yo es el conjunto, y él lo aborda muy bien. Se da cuenta de que somos un equipo', agregó Santos.

Messi en las gateras

Mientras tanto, el estelar argentino Lionel Messi se prepara para debutar el sábado en su cuarto Mundial.

La albiceleste inicia su camino a cortar con una sequía de un cuarto de siglo sin títulos -desde la Copa América de Ecuador en 1993- frente a Islandia en el primer partido del Grupo D, en el estadio del Spartak, en Moscú.

'Debemos disfrutarlo, debemos ayudarlo también para que tenga lo que se merece. Él más que nadie quiere tener su mejor Mundial, se ha preparado para esto', afirmó el presidente de la federación argentina, Claudio Tapia, consciente de que las posibilidades de la albiceleste dependen de 'la pulga'.

Rusia se hizo una fiesta

Y el jueves Rusia armó una fiesta completa.

A la colorida ceremonia que inauguró el Mundial en el estadio Luzhniki de Moscú, colmado con ochenta mil personas, la selección local se dio un festín con una pálida Arabia Saudita, a la que goleó por 5-0.

Entre el cantante inglés Robbie Williams en la ceremonia inaugural y los goles del equipo dirigido Stanislav Cherchesov, Rusia completó una jornada de ensueño que en los papeles no daba para el entusiasmo.