El puertorriqueño Miguel Cotto dijo adiós a los encordados el sábado con una demostración de coraje, pero que le fue insuficiente para vencer al estadounidense Sadam Alí en una pelea a 12 asaltos en el Madison Square Garden de Nueva York.
Cotto peleó desde el séptimo round con una lesión en el bíceps izquierdo y cedió al estadounidense de raíces yemeníes su corona superwélter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
Le dieron el veredicto unánime a Alí con tarjetas de 115-113, 116-112 y 115-113.
El boricua pareció dominar la primera parte del combate, pero el físico no le acompañó en los finales y sufrió la sexta derrota de su carrera frente a 41 victorias. Para Alí, este fue su vigésimosexto triunfo en 27 peleas.
Cotto, de 37 años, se vio superado por la rapidez de piernas y manos de su oponente más joven.
'Me siento bien con el rendimiento', dijo Cotto. 'Algo le pasó a mi bíceps izquierdo (...) No quiero poner excusas, Sadam ganó la pelea'.
'Esta es mi última pelea. Estoy bien, y quiero ser feliz en mi hogar con mi familia', afirmó Cotto, quien recibió una ovación estruendosa tanto cuando entró como cuando se retiró del encordado del Madison, su segunda casa.
La decisión no fue bien aceptada por muchos de los poco más de 12.000 aficionados que se dieron cita en la legendaria instalación.
Alí, de 29 años, había perdido su pelea anterior por el título frente a Jessie Vargas en 2016, cuando fue noqueado en el noveno asalto en un combate de peso welter.
Cotto deja el boxeo con un legado de seis cinturones en cuatro divisiones y es el único boxeador puertorriqueño que ha poseído cuatro títulos del orbe.
En su hoja de servicios figuran combates legendarios contra Floyd Mayweather Jr., Manny Pacquiao y Saúl 'Canelo' Álvarez.