Los Golden State Warriors se apresuran en su destino de ‘Superequipo’, se han convertido en el quinteto a batir desde la contratación del astro Kevin Durant y aspiran a ser el primer conjunto en permanecer invicto en los playoffs de la NBA.
Los Warriors llegan ahora a Cleveland para enfrentar en esta gran final a los Cavaliers en el juego 3 (8:00 p.m., Espn) y 4 (viernes) con ventaja de 2-0, además de 14 victorias al hilo esta postemporada.
Los ‘Guerreros’ ya se presentan como uno de los mejores equipos de la historia después de jugar en la final de 2015 (ganar 4-2) y 2016 (derrota 4-3) contra Cleveland.
En julio del 2016, los Warriors, con la llegada del astro Kevin Durant, se convirtieron en los grandes ganadores de la postemporada y en el máximo favorito al título de 2017.
Por ahora, Durant y sus compañeros de equipo están conviviendo a la perfección con la etiqueta de favoritos.
Los Warriors barrieron a los Blazers (4-0), a Utah (4-0) y a San Antonio Spurs (4-0), y ahora dominaron a los Cavaliers en los dos primeros partidos de la final, para sumar 14 triunfos consecutivos.
A pesar de las dos holgadas victorias sobre los ‘Cavs’ en esta final (113-91 y 132-113), Durant ha dicho que 'a pesar de estas dos victorias, (la final) está lejos de estar decidida'.
Marca la diferencia
Durant no vivió la derrota de 2016 ante LeBron y sus Cavaliers cuando Golden State lideraba 3-1 la serie y acabó cayendo finalmente por 4-3 en el tope.
Para evitar un remake del escenario final de 2016, Golden State se reforzó con Durant, un alero alto y fuerte que acelera el juego, crea espacios y encadena las canastas de tres puntos.