Compartir:

La Conmebol dio ganador 3-0 al Lanús argentino en el partido que perdió (2-1) ante el Chapecoense brasileño el 17 de mayo pasado en Buenos Aires por la Copa Libertadores de América, informó la organización.

De este modo, Lanús clasificó por el Grupo 7 a octavos de final de la Libertadores.

El Comité de Disciplina de la organización dio ese partido por perdido al equipo brasileño por ingreso antirreglamentario del jugador Luiz Otavio, quien estaba suspendido por una expulsión ante el Nacional de Uruguay.

El organismo juzgó que los 3 puntos le corresponden al Lanús que pasa a encabezar con este resultado el Grupo 7 con 10 puntos (clasificado), contra 8 del Nacional (clasificado), 5 del Zulia de Venezuela y Chapecoense quedó ahora con 4.

Este mismo martes se cerrará el Grupo 7 con los enfrentamientos Nacional-Lanús en Montevideo y Zulia-Chapecoense, en Maracaibo.

Con un empate, el Zulia clasificará a la Copa Sudamericana. En cambio, el Chapecoense, actual titular de la Sudamericana, tiene la obligación de triunfar para tener posibilidades de jugar en la edición 2018 de ese certamen.

El jugador brasileño Luiz Otavio, expulsado ante Nacional en el ‘Parque Central’ de Montevideo el 27 de abril pasado, fue incluido en el equipo por decisión del presidente del club Plinio David De Nes.

Otavio ingresó a pesar de la advertencia del veedor oficial de la Conmebol. El entrenador Vagner Mancini había aceptado la observación y el presidente del club pidió que de todas maneras fuera incluido.

De Nes dijo que no recibió comunicación del tiempo de castigo (tres partidos) del defensa. 'Fue mi decisión como Presidente del club', expresó a la prensa brasileña.

Otavio fue el autor del agónico gol de la victoria de los brasileños a los 88 minutos de juego, resultado que lo había dejado a tiro de clasificación a octavos.

Chapecoense participa por primera vez en la Libertadores como campeón de la Copa Sudamericana-2016, galardón que le concedió la Conmebol luego del accidente de aviación ocurrido en noviembre pasado cerca de Medellín en el que murieron 71 personas, la mayoría integrantes del plantel del equipo brasileño.

El accidente, que conmovió al fútbol mundial, se produjo cerca de Medellín donde el Chapecoense iba a disputar la primera final de la Copa Sudamericana del año pasado ante el local Atlético Nacional, que finalmente propuso darle el título al cuadro del sur de Brasil.