El japonés Kei Nishikori puso a prueba a Roger Federer y al final su físico pagó el tremendo esfuerzo, y el suizo avanzó a los cuartos de final del Abierto de Australia, con una sufrida victoria por 6-7 (4), 6-4, 6-1, 4-6 y 6-3, en tres horas y 24 minutos.
Tres horas después de que el alemán Mischa Zverev dejase al torneo sin su primer favorito, el británico Andy Murray, al vencerle por 7-5, 5-7, 6-2 y 6-4, en tres horas y 34 minutos, Federer liquidó al jugador de Shimane en otro épico encuentro, y luchará por 49 vez en unos cuartos del Grand Slam.
El suizo se enfrentará contra Zverev en uno de los dos duelos que ya han quedado definidos. En el otro lo harán su compatriota Stan Wawrinka, que derrotó al italiano Andreas Seppi, por 7-6 (2), 7-6 (4) y 7-6 (4), y se medirá con el francés Jo-Wilfried Tsonga, vencedor del británico Daniel Evans, por 6-7 (4), 6-2, 6-4 y 6-4.
A pesar de haber pasado seis meses sin jugar un partido oficial, Federer continúa luchando y ganando encuentros como si tuviese en su mochila los necesarios para guardar la calma en momentos como los que vivió este domingo, cuando Nishikori estuvo cerca de la victoria.
El japonés, ganador en Madrid 2013, en tierra, y en Miami dos años después en superficie dura, sus únicas victorias en seis encuentros, luchó hasta llevar el partido al quinto set, hasta que sus caderas dijeron basta.
Atendido por el fisio antes de comenzar el parcial definitivo ya no pudo mantener el ritmo infernal que Federer colocó en su marcha.
Federer acabó con 24 saques directos, y 83 golpes ganadores, casi el doble de su rival, y dando saltos de alegría. No era para menos, ya que han pasado cuatro años desde que el suizo ganó el último partido a cinco sets en Australia.
Entonces derrotó a Tsonga por (7-6, 4-6, 7-6, 3-6 y 6-3) en cuartos de final, aunque luego cedió a continuación contra Murray. Ahora tiene 35 años y sigue ganando. La de hoy fue su victoria 200 ante un 'top ten'.
Con la derrota de Murray y de Djokovic, solo quedan tres antiguos campeones de Australia: Federer, Rafael Nadal y Stan Wawrinka.
Vendeweghe elimina a la número uno
La estadounidense Coco Vandeweghe subió su nivel, venció a la alemana Angelique Kerber, número uno del mundo y defensora del título, por 6-2 y 6-3, y se citó con la española Garbiñe Muguruza en los cuartos de final del Abierto de Australia.
La derrota de Kerber abre las posibilidades de que la estadounidense Serena Williams recupere el puesto de número uno del mundo, algo que lograría con lograr el título por séptima vez.
Hasta este domingo, Vandeweghe solo había estado una vez en los cuartos de un Grand Slam, en Wimbledon hace dos años, pero la neoyorquina de 1,85 metros repetirá esta ronda en sus primeros cuartos en Melbourne, tras vencer a Kerber, su verdugo en los dos precedentes anteriores.
Nieta del jugador de baloncesto de la NBA Ernie Vandeweghe y de Colleen Kay Hutchins (Miss América 1952), hija de la nadadora olímpica Tauna Vandeweghe, y sobrina del jugador de baloncesto de la NBA y dos veces integrante del All-Star y entrenador Ernest 'Kiki' Vandeweghe, Coco ha unido su nombre a Venus Williams, que como ella también ha logrado los cuartos, y con la que podría enfrentarse en una de las semifinales.
'Es muy especial jugar contra la numero uno y en un lugar tan especial, y es mi primera victoria sobre una número uno del mundo, creo', dijo Coco, que se ha medido a Garbiñe en tres ocasiones, con la última para la española en Cincinnati el año pasado, y las dos primeras para la estadounidense, sobre hierba en ambas, en Hertogenbosch y Wimbledon en 2014.
'No miro el cuadro', dijo sin saber quien sería su nueva rival. Jugué con ella en Cincinnati, y fue muy ajustado, creo. Ella es una dura rival, muy diferente a la de esta noche, trataré de dormir y estar recuperada para ese encuentro', señaló la estadounidense, 35 del mundo, especialista en hierba, con dos títulos en Hertogenbosch, en 2014 y 2016.
Tras su victoria contra la rumana Sorana Cirstea, Garbiñe había comentado sobre la posibilidad de enfrentarse a Coco Vandeweghe: 'Es una jugadora incómoda, tiene mucha potencia en todos los golpes, saca bien. Puede jugar muy bien'.
Venus Williams firma los cuartos sin ceder un set
Aunque el segundo set le costó casi una hora, la estadounidense Venus Williams alcanzó los cuartos de final del Abierto de Australia, sin ceder un solo set, tras vencer a la alemana Mona Barthel, de la fase previa, y 181 del mundo, por 6-3 y 7-5.
'Naci para jugar este deporte. Soy grande, alta y golpeo fuerte. Estaba destinada a ello', fueron las palabras de la mayor de las Williams tras colocarse por segunda vez en tres años en los cuartos de final de Melbourne, y la 37 en un Grand Slam, y dedicar al público después un estudiado giro de baile que ejecuta al saludar cuando obtiene la victoria.
Los movimientos de Venus pueden parecer lentos, pero su oficio es práctico y letal en la definición. Tiene en su raqueta esa habilidad especial para acabar el punto cuando lo necesita, y todavía, a pesar de sus 36 años, la capacidad de sufrir al más puro estilo de Rafael Nadal.
La ganadora de siete grandes había ganado antes a Barthel en los dos duelos precedentes, Luxemburgo en 2012 y Tokio al año siguiente, sin ceder un set contra la germana, que en Melbourne derrotó en la primera ronda a la puertorriqueña Monica Puig.
A estacazo limpio, Venus acabó con 31 golpes ganadores, y aunque perdió su servicio dos veces, rompió el de su rival en cuatro ocasiones. No se ha enfrentado todavía a una cabeza de serie, pero lo hará en cuartos, contra la rusa Anastasia Pavlyuchenkova, 24 favorita.
La jugadora de Samara completó el círculo en el Grand Slam, al alcanzar el último cuarto de final que le faltaba al derrotar a su compatriota Svetlana Zuznetsova, octava favorita, por 6-3 y 6-3 en 68 minutos.
Pavlyuchenkova había hecho antes cuartos en Roland Garros y Abierto de EE.UU. ambos en 2011, además de Wimbledon el año pasado. La rusa se tomó casi más tiempo en firmar, escribiendo con cuidado su largo nombre en la cámara, que en superar a la exnúmero uno del mundo.