El futbolista argentino Carlos Tévez aterrizó este jueves en Shanghái, donde decenas de aficionados del club Shanghái Shenhua lo esperaban para festejar la llegada de la nueva estrella del fútbol nacional.
El argentino, quien se ha convertido en el futbolista mejor pagado del mundo tras firmar con el equipo chino, fue recibido entre gritos de '¡Carlos!' y cánticos de los seguidores del club, el principal equipo de esta ciudad ubicada en el este del país asiático. La presentación oficial de 'El Apache' tendrá lugar el próximo sábado.
El Shenhua y el Boca Juniors anunciaron hace unas semanas el acuerdo por el traspaso del futbolista de 32 años en una operación en la que el club argentino recibirá 11 millones de dólares (10,5 millones de euros).
Tévez, por su parte, recibirá 40 millones de dólares (unos 38,3 millones de euros) por cada una de las dos temporadas de su contrato con este club cuya camiseta ya vistieron estrellas como Didier Drogba o Nicolas Anelka.
Tras la salida del técnico español Gregorio Manzano, el club, propiedad del grupo inmobiliario local Greenland, está actualmente dirigido por el exfutbolista uruguayo Gustavo Poyet, que entrenó al Betis español entre mayo y noviembre de 2016.
El Shenhua ('flor de Shanghái' en chino) fue fundado en 1993 tras la creación de la liga de fútbol profesional de China, y es el heredero del Shanghai FC, creado en 1951. Su estadio, el Hongkou, tiene capacidad para 33.000 espectadores.
El equipo es el eterno aspirante a lograr el título de la máxima competición futbolística del gigante asiático, la Superliga china, competición creada en 2004, y en la que ha quedado en segundo lugar en tres ocasiones.
La llegada de Tévez tiene lugar unos días después de que la federación de fútbol china anunciara la decisión de reducir de cuatro a tres el número de jugadores extranjeros de cada equipo que pueden estar en el campo.
Esta medida, tomada para reducir la dependencia de estrellas foráneas y frenar la burbuja de fichajes que está produciéndose en los últimos años, levantó ampollas entre los equipos.
A partir de la nueva temporada, que comenzará en marzo, los clubes chinos podrán seguir teniendo como hasta ahora cinco extranjeros en su plantilla pero sólo tres de ellos podrán estar en un momento dado en el campo, uno menos que hasta ahora.
Este cambio se produce después de que las autoridades deportivas chinas criticaran la oleada de fichajes multimillonarios de estrellas europeas y americanas que se está produciendo en la liga nacional, en un país cuyo Gobierno ha diseñado un plan a largo plazo para mejorar la calidad del balompié nacional.