Fernando Alonso dio las gracias ayer a los avances en tecnología de Fórmula 1 por haber podido salir caminando de un espectacular choque en el Gran Premio de Australia.
Tras recorrer en torno a un tercio de la carrera el neumático derecho delantero del McLaren del piloto español colisionó con la parte trasera izquierda del Haas de Esteban Gutiérrez, cuando el mexicano frenaba para tomar la curva 3 del circuito.
El coche de Alonso salió lanzado a gran velocidad contra la barrera de concreto a un lado del circuito y perdió el control, dando dos vueltas de campana antes de detenerse destrozado.
Nico Rosberg, por su parte, se impuso ayer a su compañero de equipo, Lewis Hamilton, en la primera carrera de la temporada.