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Carlos Hernández no solo ha sido precursor y motor del Abierto de Tenis en silla de ruedas ‘Copa Cediul’, durante los ocho años que se ha desarrollado en Barranquilla, también se ha convertido en el apoyo de muchas personas discapacitadas que sienten en él un ejemplo para volver a ser importantes dentro de la sociedad a través del deporte.

¿Cuál es la importancia de la práctica deportiva en las personas discapacitadas?

Creo que el deporte es vida, las limitaciones las pone la mente. El deporte les da a las personas en condición de discapacidad esa válvula de escape, ese sentir que uno puede proyectarse hacia algo más. Por eso invito a todas las personas en invalidez a practicar el tenis en silla de ruedas. Hay que recordar que el discapacitado es una persona muy sedentaria, no se mueve mucho por sus limitaciones, pero el deporte siempre hace que uno continúe con las ganas de vivir y de superarse.

¿Cómo surgió la idea del torneo de tenis en silla de ruedas para Barranquilla?

El tenis en silla de rueda de Barranquilla nace de la visita que nos hace en el 2005 Fabio Padilla, un deportista en silla de ruedas enviado por la ITF, de Bogotá, de ahí en adelante hemos hecho cuatro ediciones iniciales de torneos nacionales y a partir del 2007 empezamos las ediciones internacionales para completar las ocho ediciones. Iniciamos con un ITF Futuro de 3.000 dólares y luego pasamos a 5.000 dólares, 8.000 y hoy estamos en 12 mil repartidos en todas las categorías.

¿Cuáles son esas satisfacciones que produce liderar el Abierto de Tenis y ser ejemplo para tantas personas?

Son muchas las satisfacciones que se tienen con esta copa, ver sobre todo la alegría que los deportistas manifiestan al visitarnos y la camaradería que se tiene en todos estos eventos. Realmente hace que uno sienta como muchas personas quieren salir adelante y hacer su proyección cómo deportistas.

Luego de tantos años de recorridos y aprendizajes, ¿cómo se proyecta el Abierto de tenis en silla de rueda?

El Barranquilla Open ha ido mejorando y la ITF lo ha catapultado como uno de los mejores de Suramérica. Ya somos categoría ITF3 y queremos seguir ascendiendo a categoría ITF2, donde las exigencias son mayores. Nos visitan por primera vez tenistas de España y México, que se unen a los países de Suramérica y regresa Estados Unidos que tenía tiempo que no participaba.

¿Qué es lo más difícil en su gestión de mantener vigente y consolidar durante ocho años el torneo de tenis en silla de ruedas?

Lo más difícil ha sido conseguir el patrocinio para mantenerlo, este es un torneo de mucha exigencia económica. Si no tenemos los recursos para mantenerlo y el apoyo de la empresa privada, no podríamos sacarlo adelante.

¿Que tiene de especial la octava edición que se inicia este lunes en las canchas de la Liga de Tenis del Atlántico?

Estamos muy complacidos en realizar la octava edición del Abierto de Barranquilla, que se realizará desde el 14 hasta el 17 en las canchas de la Liga de Tenis del Atlántico. Invitamos a toda la ciudadanía a que nos acompañe y vea el accionar de estos deportistas que año tras año nos visitan. En esta ocasión serán 52 tenistas representando a nueve países.

Y para las personas con discapacidad que aún no se animan a practicar alguna actividad, ¿cuál es el mensaje?

Quiero invitar a todas las personas en situación de discapacidad que se integren a la sociedad a través del deporte. El tenis en silla de ruedas es una bonita oportunidad para hacerlo, solo hay que tener ganas.