A los 12 años Mailyng Echeverría ya hablaba de arranque y envión. Se montaba en plataformas a competir en el deporte que hoy, cinco años después, la hace lucir en su pecho tres medallas de bronce, las únicas que ganó la delegación de halterofilia en los Juegos Nacionales que concluyeron este fin de semana en Quibdó, Chocó.
Mailyng es fiel a una dinastía familiar dedicada al levantamiento de pesas. Su padre y entrenador es Pedro Echeverría, además, sus hermanos Roymer y Pedro también lo practican.
En territorio chocoano la barranquillera obtuvo sus preseas en arranque, envión y en total, con un peso 170 kilogramos, en la categoría de los 69 kg.
'La verdad no pensé que me ganaría tres medalla porque todavía no tenía la edad ni la experiencia y, además, me enfrentaba a niñas de Bogotá y Antioquia', destaca Mailyng desde su casa en el barrio Soledad 2000.
Aunque postergó el oro para los próximos Juegos, la joven pesista y estudiante de seguridad ocupacional, mantiene fuerte la dinastía Echeverría.