Compartir:

A sus 72 años el cantante guajiro Tomás Alfonso Zuleta Díaz no da señales de cansancio. Se sube al escenario y brinca de un lado para otro con el mismo ímpetu con el que lo hace cualquier joven que se abre camino en la música.

Este referente del folclor vallenato, considerado uno de los últimos exponentes de la escuela tradicional, cuenta con una trayectoria de 52 años y aún siente el compromiso de seguir lanzando nuevas propuestas. 

Luego de siete años de ayuno, Poncho, como se le conoce popularmente, estrena una nueva producción musical denominada 'El juglar y el rey de reyes', junto a su compañero de fórmula hace 17 años, Gonzalo Arturo ‘el Cocha’ Molina.

Son cuatro canciones las que integran su propuesta de fin de año y que espera se extienda hasta la temporada carnavalera. 

'A quién no le gusta eso', del maestro Aníbal Velásquez; 'La gorda', de Rodolfo Zapata; 'Ajena', de Omar Geles, y 'El de moda', de la autoría de Miguel Herrera, son las letras que optó por grabar.

'Me tomé siete años para volver a salir con nueva música, yo ya tengo una carrera consolidada, pero lo hice porque siento la necesidad de defender lo mío y dar ejemplo a los jóvenes. Me quedé solo, se me fueron mis laterales, mis dos guayacanes, Diomedes y Oñate, así que la gente me exigió grabar para ponerle la cartilla abecedario a la nueva generación. Creo que con la partida de Jorge este año tenía ese deber. Solo fueron cuatro temas, porque ahora el mercado así lo exige, aunque yo tengo listas otras 14 canciones que iremos lanzando de a poco', dijo Poncho a EL HERALDO durante el lanzamiento de su álbum en la capital cesarense, agregando que el género está bajo su responsabilidad y se comprometió a que mientras viva 'no se perderá la esencia de la música vallenata'.

El también abogado escogió la Biblioteca ‘Rafael Carrillo Lúquez’ como escenario para entregar al mundo vallenato los detalles de su nuevo ‘hijo musical’. Esto para seguir atado al mundo de las letras.

'Yo acompañé a Gabo a Estocolmo a recibir el Nobel de Literatura en 1982. Eso junto al Grammy que ganamos en 2006 es de las grandes recompensas que me ha dado la música, por eso aquí me siento en mi hábitat natural, yo leí mucho en el colegio y la universidad. No he parado de hacerlo, sigo disfrutando los clásicos de García Márquez, he repasado dos veces Cien años de Soledad, me fascina'.

De su nueva propuesta destaca la obra que el barranquillero Aníbal Velásquez grabó en 1979. 'Creo que tengo en mis manos la canción del Carnaval', comenta sobre A quién no le gusta eso.

Sostiene que es un hombre polifacético y por eso no le da miedo adaptar los sonidos que nacen en países como Cuba y Puerto Rico para traerlos al vallenato.

'Me encanta la salsa, especialmente la de Richie Ray y Óscar D’ León, me hacen temblar la tierra; la ranchera de José Alfredo Jiménez, Javier Solís y Pedro Infante me fascina; la balada y el bolero me matan, y ni qué decir de la música llanera. También me conjugo mucho con la música cubana que es la matriz del Caribe. Toda la música es fusionable, lo que pasa es que hay que saberlo hacer y no formar los zaperocos que hacen los pelaos de ahora’'.

Hay un tema que considera su radiografía, se trata de 'El de moda', porque él 'sigue dando lidia hasta en Instagram y Tik Tok'.

Sobre 'La gorda' dijo que pretende exaltar la belleza de la mujer y no causar ningún tipo de polémica. 'Me gustan mucho, las gorditas no deben afligirse porque el feo tiene a quien gustarle'. 

'Ahora se disputan el mejor carro'

Con toda la jocosidad que lo caracteriza, el hijo de Emiliano Zuleta Baquero y ‘La vieja Sara’ también lanza dardos directos a la nueva generación artística, de quienes dice están enfocados en otros aspectos que rayan en la vanidad y la superficialidad.

Para llamarles la atención evoca a uno de sus grandes amigos, el fallecido Jorge Oñate, a quien consideró bastante crítico.

'Una vez para picarle la lengua a Oñate le dije: Carajo compadre mire el tremendo artista que viene ahí, maneja una camioneta de 200 millones, y el otro no se diga, viene en una de 300. El compadre se enojó y me dijo: Bueno, entonces que suba a tarima con la camioneta y la ponga a cantar a todo timbal a ver cuál es la vaina', recordó entre risas.

Al pedirle un consejo de oro para quienes viven de la música, Zuleta expresa que 'deben seguir una línea de conducta' y 'respetar al público por encima de todo'.

'Yo soy muy jocoso y siempre me andan echando vainas en las redes, pero jamás he salido con un comentario grosero. Yo ando pendiente de las redes y me sacan muchas risas las locuras que me dicen. Los pelaos de ahora que andan en el mejor carro se les suben los humos y eso está mal, se los digo porque yo bastante que corrí y ahora ni troto'.

A su turno, ‘el Cocha’ Molina dice que ha encontrado en Poncho un hombre cargado de sabiduría y mucha vitalidad. 

'En pandemia aprovechamos mucho y durante seis meses trabajamos de manera dedicada estos cuatro temas que requirieron mucha creatividad. Lo que dice el maestro es cierto, tenemos otras 14 canciones ya grabadas y estaremos escogiendo el momento para irlas soltando'

Agrega que 'Poncho parece un pelao' y esa actitud ha sido clave para seguir vigentes. 'No se deja ganar por la flojera y siempre está exigiendo lo mejor de cada músico, él es muy necio y eso lo ha llevado al éxito'.

El campo, su fortín.

El denominado ‘Pulmón de Oro’ es un hombre criado en el campo y es precisamente en su finca ‘La Milagrosa’, ubicada en el municipio de Astrea, Cesar, donde encontró su mejor refugio durante esta pandemia. Pese a que sufrió una caída y debió ser operado del hombro derecho, es allí donde se hace fuerte. 

'Por fortuna estoy recuperado, no puedo estirar bien el brazo para ponerme el micrófono al pecho, pero la garganta sigue intacta y ese es mi mayor impulso'.

En su finca se alimenta bien y es eso lo que le ha permitido tener 21 hijos. 'Como malanga, guartinaja, hicotea y morrocoyo, eso me da energía, a otros se la da el milo, pero a mí me la da es la comida de monte'.

También enfatiza en que no se siente viejo y aunque muchos lo critiquen, él sigue repleto de vida. 'La edad solo va en la cédula, el hombre tiene la edad de la mujer que lo acompaña, por eso es que me ven como un pelao de 18', contó ‘muerto de la risa’.

Sobre sus planes de retiro, afirma que no están cercanos, y que el único que tiene ese poder es Dios. 

'Yo me retiro de la música el día que me muera, mi compadre Jorge y Diomedes me están llamando, pero deben esperar un poquito. Hay días que amanezco cansado, porque ya son 72 años los que tengo entre pecho y espalda, pero el cariño de la gente renueva mis energías'.