Entre música y vientos de saberes y tradición, la Plaza Central de Soledad se engalanó este domingo con una gran ‘narratón’.
El evento, que culminó la agenda de ‘Soledad Cuenta’, que se hizo por primera vez este año, convocó a decenas de personas que prestaron su oído para deleitarse con las intervenciones de más de 25 narradores orales.
Historias de amor, aventuras, drama y fantasía, encantaron al público asistente. Esta narratón también fue la apertura de la edición 14 de El Caribe Cuenta, —organizado por Luneta 50— que se cumplirá hasta el 5 de septiembre.
El inicio estuvo marcado con la narración de varios niños pertenecientes al semillero de El Caribe Cuenta. Ellos con su inocencia y su sentido del humor, sacaron más de una carcajada a los espectadores.
Los decimeros también subieron a tarima para encantar al público con sus improvisaciones.
Posteriormente los aplausos dieron la bienvenida a los narradores orales invitados a este espacio lleno de historias. Cada palabra envolvió al público en un viaje por nuestras raíces.
'Esta es la posibilidad de narrar y narrarnos porque no solo compartimos cuentos sino también compartimos lo que somos como personas. Somos conscientes de que no se puede renunciar a estos espacios', dijo Pedro Mario López, cuentero cubano.
La cultura y la tradición oral mexicana llegaron en voz de la joven cuentera Lidia Zaragoza. 'El poder volver encontrarnos con el público, eso me emociona mucho, y más en mi caso por estar conociendo Colombia (...) El resguardo de nuestras memorias depositada en varias historias, es la esencia de estos espacios como Caribe Cuenta'.
El cubano Aldo Méndez, que tiene una participación activa en el evento, también estuvo en escena. 'Teníamos una exigencia clave de hacer cuentos breves y dinámicos y lo logramos'.