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Una capa de pintura blanca cubrió, el pasado 23 de septiembre, la silueta de Donald Trump manipulando a un títere del senador Álvaro Uribe, quien a su vez manipulaba al presidente Iván Duque, parte de la obra sin terminar en los muros del Centro Colombo Americano, en el centro de Bogotá, por los reconocidos artistas Power Paola y Lucas Ospina, invitados al 45 Salón Nacional de Artistas.

La intervención, que hacía parte de la exposición Arquitecturas narrativas, fue borrada por instrucción de la dirección del Colombo Americano y, tras esa decisión, el acto fue denunciado por los mismos artistas a través de sus redes sociales, así como por el 45SNA. 

'Nuestra propuesta era el diálogo y su respuesta fue borrarlo. Las pesadillas se vuelven realidad', dijo a través de Instagram la historietista e ilustradora colombo-ecuatoriana, Power Paola, autora de las memorias gráficas Virus Tropical.

El diálogo ilustrado, además de sus críticas a Trump, Uribe y Duque, dedicaba imágenes a la tala indiscriminada de árboles, la exploración de la sexualidad, la corrupción, la censura, entre otros temas. 

'Se trata de un claro acto de censura, y como tal, resulta inadmisible', fue la respuesta del director artístico del 45 Salón Nacional de Artistas, Alejandro Martín Maldonado, quien explicó que la intervención en los muros exteriores hacía parte del acuerdo con el Centro Colombo Americano, 'que acogió con entusiasmo la invitación' de ser sede de uno de los eventos artísticos más importantes del país.

 'Desde la institucionalidad ha habido una total libertad para el desarrollo de los proyectos curatoriales, así como de las obras de los artistas invitados (...) Nos sorprendió la decisión tomada por el Centro Colombo Americano de borrar el mural (...) Sólo fuimos informados cuando ya se estaba ejecutando dicha acción', se lee en las declaraciones de Carolina Muñoz Uribe, directora Ejecutiva del 45SNA, publicadas por la Revista Arcadia. 

Ante lo ocurrido, los artistas Power Paola y Lucas Ospina hicieron una nueva intervención, como especie de palimpsesto, en que escribían sobre la ilustración borrada: 'aquí había un dibujo de un político con un hacha (Peñalosa)', 'aquí estaba Tom Sawyer con su brocha blanca (tapando un letrero que decía: Yankee go home)', entre otros mensajes. 

Ayer, el Centro Colombo Americano se pronunció al respecto y dijo que las ilustraciones se ejecutaron 'sin previo aviso, sin autorización alguna y sin conocimiento formal de nuestra parte', de acuerdo con un comunicado, algo que no coincide con la versión del 45SNA ni de los artistas. 

'Estuvimos casi una semana pintando, nos guardaron las pinturas en su bodega todos los días, nos prestaron las escaleras. Todos los porteros estaban al tanto ¿Cómo pueden decir que fue de una manera informal, sin autorización alguna y sin conocimiento formal de nuestra parte?', cuestionó Power Paola a través de Twitter. 

En sus declaraciones, el Colombo también ofreció disculpas y aclaró que la exposición Arquitecturas narrativas continuará abierta al público en sus instalaciones.