Compartir:

Humanos con rostro de plátanos, caracoles y mariposas en su cabello. Detrás de ellos, un desierto en La Guajira o un paisaje propio de algún rincón del Caribe. Miradas, siempre distintas, a una región que suele pintarse desde los estereotipos y que esta vez se retrata desde su naturaleza y desde cómo el hombre se enfrenta y se relaciona con ella.

La nueva exposición de la Galería Elsa Piñeres, Caribe inmarcesible, es un recorrido surrealista por cuatro perspectivas que dialogan entre sí. La de cuatro artistas de la región: Adalberto Calvo (Barranquilla), Taibel (Santo Tomás), Limán Zúñiga (Valledupar) y Omar Mendoza (Barranquilla), quienes proponen, a través de sus pinturas, una forma de reivindicar y resignificar la identidad regional.