Con el objetivo de que las tradiciones folclóricas del Caribe colombiano no se pierdan, el Cumbión de Oro se ha puesto en la tarea de enseñarlas a las nuevas generaciones.
Nacido en 1984 y con 31 participaciones consecutivas en el Carnaval de Barranquilla, el Cumbión de Oro, bajo la rienda de su creador y director, Gabriel Marriaga, se aventura en una iniciativa pedagógica para cultivar en los niños el amor por la tradición.
'Queremos hacer énfasis en formar hacedores del Carnaval y trabajar muchísimo sobre los niños, comenzar un proyecto con futuro, una especie de escuela de formación de cumbia y otros ritmos', sostuvo Marriaga durante el lanzamiento de la iniciativa.
Como explicó Gina Navarro, integrante te la cumbiamba y coreógrafa en cargada, se quiere trabajar con los niños, que son el futuro del Carnaval, para que el legado folclórico de la región Caribe no se pierda.
'La idea es abrir grupos y talleres de formación folclórica, no solo a nivel de la cumbia, sino de todos los bailes y ritmos autóctonos de nuestra región', dijo Navarro.
Se conformarán grupos de niños, de 4 a 12 años, para impartirles conocimiento en talleres durante todo el año, y en la época de noviembre y diciembre, empalmar con la temporada de Carnaval para que los niños que han participado del semillero se vinculen, si lo desean, a la cumbiamba infantil.
'La idea es que esto no se pierda, que tengan un conocimiento, que sepan la historia y lo que hay detrás de los ritmos. Y cuando uno entiende en el fondo de dónde nacen, es más fácil tomarle amor y respeto', finalizó Gina Navarro. MZB