Decenas de vehículos compactadores de residuos sólidos permanecen a un costado de la vía que conduce al relleno sanitario, a la espera de que se les autorice el paso para disponer los desechos.
La situación es generada por causa de una protesta realizada por decenas de habitantes de la vereda Loma Grande, quienes exigen la solución a una aparente filtración de lixiviados.