Cinco años han pasado desde que se puso en marcha el Programa de Desarrollo con Enfoque Territorial, Pdet, en el sur de Córdoba, un espacio en el que más de 7 mil campesinos decidieron sobre la ejecución de obras que consideraban necesarias para superar el rezago histórico en el que habían estado inmersos por causa de la violencia.
Puestos de salud, escuelas y proyectos productivos son ahora una realidad para los habitantes de los municipios de Tierralta, y Valencia, en el Alto Sinú; Montelíbano, San José de Uré y Puerto Libertador, en la subregión del Alto San Jorge, donde anteriormente los únicos que se consolidaban eran los grupos al margen de la ley.
Si bien no se trata de olvidar, los campesinos procuran dejar atrás el pasado violento al que fueron sometidos cuando la adversidad tocó a sus puertas; para por fin reconciliarse con la vida, bajo un nuevo sol que ilumina sus días con esperanza, con resiliencia, ofreciéndoles una renovada visión.
'Se cumplen cinco años en los que vemos cómo estamos cambiando nuestra calidad de vida. Hoy en día desde mi asociación contamos con 40 hectáreas sembradas en papaya, que benefician a más de 100 familias, ya logramos el primer despunte de las primeras 10 hectáreas que comenzamos a cosechar', dijo John Aldana, representante legal de la Asociación Agroecológica de Productores y Comercializadores de Papaya del Alto Sinú, Appalsi.