Al uso de agroquímicos en los cultivos atribuyen los apicultores del municipio de Tierralta la muerte de 18 millones de abejas y la pérdida de 12.600 kilos de miel, cuyo valor en pérdida supera los $100 millones de pesos.
El hecho, que deja prácticamente en la quiebra a 22 familias campesinas, se registró en los apiarios instalados alrededor de las veredas Bosques del Futuro, Quimarí, La Botella, Villa Providencia y Cerro de Las Tetas, zona rural de esta localidad, en la subregión del Alto Sinú, al sur del departamento de Córdoba.
Euclides Herrera, líder y vocero de los apicultores afectados manifestó que 'no tenemos todavía definido qué es lo que está matando a nuestras abejas, pero lo más probable es que en este caso también se trate de una intoxicación por agroquímicos. El año pasado también se presentó la misma mortandad, entonces lo más probable es que sea una intoxicación por agroquímicos'.
En total se habrían visto afectadas 280 colmenas en las que obtenían parte de su sustento las pequeñas asociaciones productoras de miel en esta zona de Córdoba, departamento considerado como uno de los principales productores de miel de la Costa Caribe y en todo el territorio nacional.
El caso fue puesto en conocimiento de las autoridades judiciales, que se encargaron de tomar las muestras para establecer la causa de la muerte. 'Ya se tomaron las muestras y esperamos que eso nos permita establecer a ciencia cierta qué es lo que está matando a nuestras abejas porque no es la primera vez que se registran este tipo de muertes', sostuvo el apicultor.
Según el reporte entregado por las asociaciones productoras de miel, el año pasado hubo pérdida de 77 millones de abejas por causa de la muerte por intoxicación de 1.285 colmenas, en esta misma zona del departamento.
'Pensamos que se podría tratar del uso de los químicos que se utilizan en esta temporada del año en los diferentes cultivos en los alrededores, en los al rededores del apiario, pero esas son cosas que deben establecer las autoridades', sostuvo Herrera.
Con base en el primer reporte entregado por los apicultores se trataría de 280 colmenas pero la cifra podría incrementarse, pues los campesinos siguen haciendo inventario en las zonas afectadas. 'Eso tiende a crecer porque realmente los apicultores que están visitando sus colmenas y están dando reportes esperemos que no se nos vaya tan alto el número de colmenas, pero sin duda es algo que lamentamos porque las abejas son las principales protectoras de los ecosistemas y no se está protegiendo el ambiente', puntualizó Euclides Herrera.
En el mes de febrero de este año un total de 40 colmenas, correspondientes a 15 mil abejas, aparentemente por la misma causa.