El Juzgado Primero Penal Municipal Ambulante de Montería envió a la cárcel al pastor de la iglesia evangélica Cristo De la Roca, ubicada en el barrio Furatena, de esta ciudad, identificado como Andrés Quejada, a quien, por el relato de un testigo, vincularon a la investigación que adelanta la Fiscalía por los delitos de acceso carnal violento y homicidio cometidos contra la joven universitaria Nataly Salas.
La madrugada del 3 de diciembre del año pasado el cuerpo de la joven, quien cursaba segundo semestre de licenciatura en Matemáticas, en la Universidad de Córdoba, fue encontrado en la ribera de la laguna de oxidación de la ciudad, en el sector noroccidental, con signos de violación y señales de golpes recibidos con arma contundente.
Las investigaciones de la Fiscalía permitieron establecer que el líder religioso habría sido el determinador del asesinato de la joven, con base además en la entrevista realizada a una amiga de la víctima, quien le habría asegurado a los investigadores que Nataly tuvo algún tipo de relación sentimental con el acusado. Sin embargo, en la audiencia de imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento Quejada se declaró inocente y otros colegas suyos aseguraron a la justicia que para la fecha de los hechos este se encontraba en una congregación por fuera de Montería.
Por este mismo homicidio están asegurados desde el pasado 3 de abril Enio José Peñata Herrera, natural de San Pelayo y quien trabajaba como mototaxista en Montería y Ángel David Sánchez Tordecilla, residente en esta capital.
En este caso el testigo clave ha sido un hombre con limitaciones de habla y escucha, quien cuidaba carros en el barrio la Castellana, cerca del lugar donde fue hallado el cuerpo de la universitaria y quien esa madrugada, como era su rutina, pasaba por el sitio cuando observó lo que hacían con la joven en la laguna de oxidación.
