A través del presidente de la junta de acción comunal de la vereda Las Mercedes, en el corregimiento de Mata de Caña, Lorica, Deimer Arteaga, las cerca de 400 familias afectadas por el rebosamiento del río Sinú en Lorica, pidieron a los gobiernos local y departamental la atención de las epidemias que empiezan a aparecer en medio de la humedad, pero en terreno y no que se haga únicamente en el hospital del casco urbano.
'Las viviendas se mantienen húmedas, la situación es crítica y por eso pedimos la realización de brigadas de salud. Después de toda esta crisis los campesinos no tenemos plata para transportarnos enfermos hasta Lorica para que nos atiendan en el hospital o en el centro de salud', precisa el vocero comunal.
Dijo Arteaga que por ahora las epidemias que aparecen en los afectados por el invierno son: fiebre, gripa, brotes en la piel y dolor general.
La Alcaldía de Lorica reportó causalmente la semana pasada la aparición de 1.365 casos de epidemias en la zona de la inundación, entre ellas 254 casos de Enfermedad Diarreica Aguda (EDA), 11 casos de Varicela y 1.100 casos de infecciones respiratorias.
Arteaga confirmó que efectivamente se ha notado una reducción en el nivel del río Sinú durante las últimas 24 horas, tal como advirtió Urrá que pasaría, después de apagar una de las cuatro turbinas de generación de energía en la represa, a raíz de un ‘veranillo’ de cuatro días en la cuenca alta del Nudo del Paramillo.
'Creemos que el río ha bajado en esta zona unos 30 centímetros, de acuerdo con lo que hemos notado, aunque el nivel sigue siendo alto y el río sigue filtrando agua por los costales que fueron instalados donde se abrieron los boquetes', señaló el líder comunal.
Sin embargo, el coordinador de la oficina de Atención y Prevención de Desastres en la Gobernación de Córdoba, Fabián Lora Méndez, confirmó que nuevamente llovió en Paramillo y con ello se mantiene la alerta roja. El funcionario agregó que una nueva creciente está por pasar por las cuencas media y baja, lo que pone en alerta de nuevo a Montería, Cereté, San Pelayo, Lorica y San Bernardo del Viento.
'Después de haber recibido una buena noticia porque había dejado de llover en el Paramillo, nuevamente amanecimos en alerta roja, el llamado a las poblaciones ribereñas es a estar muy pendientes del nivel del río, mientras seguimos con la atención a las primeras familias damnificadas', precisa el funcionario.
Lora Méndez insistió que ya son cerca de 20 mil las ayudas entregadas a las cerca de 13 mil familias que han resultado afectadas por esta ola invernal en este Departamento.
