Compartir:

Delincuentes motorizados hirieron con arma de fuego en el rostro a un niño de 11 años para despojarlo de un celular de alta gama con el que el pequeño escuchaba música.

El hecho ocurrió a la 1:20 de la madrugada en comidas rápidas Andrés Express, carrera 15 con transversal 3, barrio la Granja, sur de Montería.

César Guerra, padre del menor, dijo en las afueras de la clínica Zayma, donde su hijo permanece en la Unidad de Cuidados Intensivos, que están a la espera de otros exámenes de especialistas que determinarán qué tipo de daños hizo el proyectil a nivel del maxilar superior, además de una fractura ya confirmada en el paladar.

Explicó que el niño estaba a esa hora en el establecimiento porque el negocio funciona en su propia casa, hasta donde llegaron los atracadores que no contentos con arrebatarle el teléfono a su hijo le dispararon dos veces. Una de las balas entró por el pómulo izquierdo con orificio de salida a la altura del cuello. 'Yo me estaba bañando para cerrar el negocio cuando escuché dos disparos, salí corriendo en toalla y vi a mi hijo sangrando, lo subimos al carro para trasladarlo a la clínica, donde aún permanece. El proyectil salió y creemos que los médicos especialistas han descartado cualquier complicación', expresó Guerra, mientras adelantaba diligencias para conseguir una cama en UCI para niños.

El niño es el mayor de dos hijos. La familia ha sido objeto de tres atracos en el último año y medio en Montería. 'Esto que ha sucedido con mi hijo es lastimoso y duro, realmente no quiero que le pase a otro pequeño. Mi hijo es un niño que obviamente no opuso resistencia, no entiendo por qué después de haber entregado el teléfono le dispararon'.

Hoy en la tarde el pequeño era sometido a una Tomografía Axial Computarizada (TAC) en 3D para verificar si existen otros daños más internos y si es necesario someterlo a cirugía.

El comandante de la Policía Metropolitana, coronel Jesús Díaz, dijo que se están verificando las cámaras de seguridad de esa zona para detectar imágenes que ayuden a identificar a los delincuentes.