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Es común ver en las calles de Riohacha, Maicao y municipios del departamento de La Guajira, indígenas de la etnia wayuu ofreciendo al público local y visitante sus hermosos tejidos representados en chinchorros, hamacas y sobre todo las mochilas más deseadas por los colombianos y extranjeros.

Y es que de las manos mágicas de esta etnia, salen auténticas obras de arte que son usadas a diario y que son dignas de exhibición en cualquier espacio del mundo, por su delicado trabajo, lo fino de sus materiales y por el esmero que se nota detrás de una prenda de esta naturaleza.

Detrás de esas artesanías que se comercializan en toda La Guajira, hay todo un espectro cultural que por generaciones se ha legado entre los integrantes de la comunidad wayuu y que hoy en día han alcanzado fama nacional e internacional.

Desde esas humildes manos se genera una economía en torno a la cultura, que va agregando valor en toda la cadena que va desde quienes cultivan y tratan la materia prima, pasando por artesanos y tejedores, hasta llegar a los comercializadores que se las dan a conocer al mundo.

Las artesanías wayuu son apenas una muestra de la riqueza cultural de un departamento que además entrega al mundo, su música de acordeón, sus bailes típicos y una gastronomía muy particular capaz de satisfacer a los más exigentes paladares.

La crianza y el consumo del chivo, sus pescados y mariscos, los animales de caza, las preparaciones ancestrales de las poblaciones indígenas, forman parte de un acervo cultural que es un patrimonio no solo de los guajiros sino de la Región Caribe y de toda Colombia.

Este sector también fue embestido por las restricciones sanitarias impuestas por la pandemia y ahora está volviendo a tomar los cauces que lo han llevado a ser el motor de la economía y la fuente de sustento de decenas de familias.

El tema de la economía naranja se lo han tomado muy en serio en el departamento de La Guajira y en el impulso de la misma el Gobierno nacional y departamental han hecho esfuerzos para apoyar el emprendimiento en un sector que mueve importantes divisas.

De hecho, el primer Consejo Nacional de Cultura del 2021 se hizo en Riohacha siendo la primera vez que el evento se hace de manera descentralizada, con el fin de trabajar de la mano con los territorios para el fortalecimiento del sector.

El diálogo con 19 consejeros de cultura, que representan sectores como literatura, música, teatro, cine, circo, museos, bibliotecas, entre otros, se socializaron las apuestas del Ministerio de Cultura para el cierre de periodo del gobierno actual, el Plan Nacional de Cultura y las estrategias de reactivación.

Durante la pandemia la cultura ha sido el sector de la economía que más empleos ha perdido, según el Ministerio de Cultura, con cerca de 212.000 puestos, para lo cual desde el gobierno central se están adoptando acciones que benefician a los territorios, incluido La Guajira.

Se determinó un plan de salvamento de las artes, la cultura y el entretenimiento para los subsectores y los territorios de una forma adecuada y eficiente, que va desde soluciones financieras como alivios, incentivos y estímulos, y también programas enfocados en la reactivación de escenarios, en la circulación de artistas y la formación jóvenes.

Entre los temas de la agenda del Consejo Nacional de Cultura se conversó sobre presupuesto del sector cultural, la actualización del Plan Nacional de Cultura, las políticas públicas de arte y cultura, y las estrategias de reactivación del sector y la circulación de artistas.