Una de las principales preocupaciones de los pacientes que sufren cáncer de piel y requieren tratamiento quirúrgico para retirar lunares o tumores, son las posibles marcas o cicatrices que puedan afectar la apariencia o contextura normal del rostro.
Más allá del aspecto funcional y estético, entra en consideración la necesidad de evitar que el tumor vuelva a aparecer o queden remanentes de piel con células cancerosas.
El Hospital de la Universidad del Norte ha implementado una novedosa tecnología conocida como Cirugía Micrográfica de Mohs, procedimiento que mejora las alternativas para los pacientes con diagnóstico de cáncer de piel con riesgo alto de volver a aparecer o en zonas delicadas para reconstruir como el rostro y otras áreas del cuerpo.
'La cirugía micrográfica es más usada en carcinoma basocelular, escamocelular de la piel y tiene algunas utilidades para algunos melanomas. Esta técnica utiliza equipos modernos que permiten realizar una extracción quirúrgica del tumor con márgenes oncológicos de menor tamaño, asegurando una resección completa de la lesión. De esta manera, ahorramos tejido sano de piel para realizar reconstrucciones inmediatas con la seguridad de tener el control oncológico de la lesión', explica la doctora Teresa Vergara, cirujana plástica reconstructiva y estética del Hospital Universidad del Norte.
UN SOLO TIEMPO QUIRÚRGICO
'Mientras el paciente aún está en quirófano, la muestra extraída se estudia en el laboratorio. Así se puede establecer si salió completo y si es posible iniciar de inmediato el proceso de reconstrucción quirúrgica', asegura la cirujana, quien destaca que de esta manera se ahorran tejidos y se garantiza el proceso de una reconstrucción segura, en un solo momento quirúrgico: libre de tumor, libre de cáncer y reconstruido.
Para cualquier tipo de cáncer es importante identificar las señales de alarma, conocer los síntomas comunes y consultar al dermatólogo oportunamente.