Compartir:

Juan Miguel Durán, presidente de la Federación Colombiana de Transportadores de Carga Colfecar, afirma que los transportadores son una pieza fundamental dentro de la dinámica económica del país, aunque aclara, que aún hay muchos puntos que se deben tener en cuenta para seguir mejorando y fortaleciendo las actividades.

Para Durán el sector del transporte de carga y logística tiene diferentes frentes que atender para mejorar su competitividad, algunos hacen parte de su esfera interna y otros dependen de agentes externos, en su mayoría ligados a decisiones del Gobierno.

'También -señala- debemos tener en cuenta a los demás actores de la cadena logística tales como los generadores y destinatarios de la carga, los otros modos de transporte de carga, las concesiones viales, los patios de contendores y los puertos fluviales, marítimos y aéreos, entre otros'.

El compromiso dentro de los objetivos de competitividad viene en gran parte de las empresas transportadoras quienes deben encaminar sus labores teniendo en cuenta el desarrollo de las tecnologías que ha incursionado en todos los sectores de la economía, una de las alternativas es emprender acciones disruptivas que le permitan a las empresas implementar de manera eficiente las nuevas herramientas que ofrece el mercado para lograr mejores indicadores de eficiencia en su gestión operativa, administrativa y financiera.

TEJER ALIANZAS.

Juan Miguel Durán considera que las alianzas se pueden tejer entre los protagonistas. 'Es importante crear alianzas entre las mismas empresas de transporte, que permitan optimizar sus recursos, por ejemplo, impulsando la asociatividad para hacer uso mancomunado de la infraestructura que tengan algunas de ellas y que pueda ser utilizada por otras compañías del sector', manifiesta.

Existen algunos problemas a los que se ha enfrentado el sector desde hace varias décadas, que aún no se resuelven y que por el contrario, se agravan, como el no pago a tiempo por parte de los generadores de la carga, lo que ha hecho que los empresarios del transporte se hayan convertido en financiadores, al tener que aceptar pagos hasta de 180 días por sus servicios mientras que los costos por su operación son al día.

Ejemplo de ello es el pago de un anticipo del 50% al conductor para iniciar un viaje y en un mínimo de 5 días y después de entregada la carga el otro 50%.

'Esto ha generado un desbalance financiero para las empresas que esperamos que se solucione con el proyecto de Ley de Pagos Justos, que hace curso en el Congreso', comenta Durán.

INFRAESTRUCTURA VIAL.

Otra de las necesidades del gremio está en avanzar en el mejoramiento de la infraestructura vial, optimizar los corredores logísticos y los procesos de cargue y descargue en los terminales marítimos, de los trámites aduaneros y de los tiempos muertos producidos por los generadores y destinatarios de la carga.

También se requiere revisar el actual esquema de libertad vigilada para garantizar costos eficientes, que permitan una mayor productividad y competitividad del sector; para el sector esto debe estar ligado a la fijación de una nueva política de combustibles para el trasporte público de carga que contribuya a reducir los costos operativos ya que este rubro tiene un peso del 35% en los mismos.

Otros puntos tienen que ver con la facilitación para que las empresas puedan realizar un programa de reposición vehicular escalonada lo cual le ayuda tanto a los pequeños propietarios como a las grandes empresas de transporte, definición de la vida útil de los vehículos de carga, un programa eficaz de formalización de todo el sector con acciones contundentes en su control y vigilancia, la reducción de las restricciones a la movilidad por parte de autoridades municipales con estrategias conjuntas con el sector que mitiguen el impacto y exigir un tratamiento igual para los transportadores colombianos frente a sus similares de los países de la CAN, entre otros.