En 2022, el aumento de siembra de coca fue del 61%, para llegar a 230 mil hectáreas. Los rumores de extorsión por doquier y sicariato en todo el país, inclusive en las zonas más seguras de Bogotá, van en línea con una esperada siembra de coca que puede llegar a las 300 mil hectáreas. Con otras fuentes como la minería ilegal y la trata de personas financiando el conflicto, creer en la buena voluntad de cabecillas es claramente insuficiente.
La idea no consiste en regalar subsidios al sector privado ni repetir la trágica historia del estado en sus emprendimientos, pero sí facilitar la inversión privada. La normativa de las Alianzas Público Privadas resultó demasiado onerosa para las entidades territoriales, solo los mega-proyectos pueden asumir los costos asociados. Lo que está dando resultados son las empresas mixtas donde las entidades territoriales aportan lotes o activos existentes para ser dinamizados por inversión privada.
Con los retos que existen en la banca tradicional, durante 2024 el factoring puede ser una bendición para poderle otorgar crédito a miles de empresas. Al atraer mayor capital, esperamos que no solo se permita atender facturas más pequeñas, sino que los emisores disponibles no solo sean los que son AAA. Esta herramienta se debe, inclusive, extender a las libranzas para ofrecer crédito a las personas naturales
Si se pudiera abrir cuentas en dólares en Colombia, muchos de esos recursos se quedarían en el país en vez de irse a Panamá o Miami. Durante 2023 la inversión colombiana en el exterior creció 64%. Adicionalmente, el sector exportador podría tener créditos en dólares eliminando su riesgo cambiario que hoy puede costar 8% de ventas en coberturas. Tocaría hacer ajustes en materia de depósitos y provisiones, pero nada que no esté inventado.