Aproximadamente 7,3 millones de personas en Colombia viven en la actualidad en arriendo. De acuerdo con cifras del DANE, un 40,3 % de los hogares viven en esta modalidad.
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Por esto es importante que tanto inquilinos como propietarios conozcan los derechos y deberes que tienen al momento de formar un contrato de arrendamiento. Esto evita que ambas partes puedan tener un conflicto en el futuro.
Uno de esos problemas que se ha vuelto común es cuando el canon de arrendamiento no se paga a tiempo y el dueño del inmueble quiere recuperar su propiedad. En este tipo de situaciones se ha venido implementando una práctica arbitraria: la de cambiar las chapas o guardas de las puertas.
De acuerdo con la ley, realizar el cambio de chapas o cerraduras del inmueble arrendado sin el consentimiento del inquilino es una violación a la tenencia. Esta práctica es ilegal y puede ser denunciado con la Policía Nacional, sin importar si el inquilino debe meses de arriendo.
El arrendamiento de vivienda urbana en Colombia reconoce el derecho del inquilino a disfrutar pacíficamente del inmueble y en totalidad la privacidad del inmueble arrendado.
Las norman señalan que si se incumplen las normas, como el pago del canon de arriendo, y el dueño quiere dar por terminado el contrato, se debe primero pasar por un proceso judicial de restitución de inmueble arrendado, de acuerdo a lo que indica la Ley 820 de 2003.
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La abogada Katheryne Guerrero explicó en sus redes sociales un ejemplo de esta situación.
El Código Penal Colombiano (art.263) establece que el desalojo de un inmueble solo se puede hacer mediante orden judicial, no por decisión o fuerza del dueño.