Luis Carlos Reyes, exministro de Comercio y exdirector de la DIAN, sigue prendiendo el ventilador luego de su salida del Gobierno. Ahora, entre los nombres que mencionó está el de Ricardo Bonilla, exministro de Hacienda.
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Según dijo Reyes en entrevista con María Jimena Duzán, su salida de la DIAN se debió, entre otras cosas, a una mala relación con Bonilla. Contó que uno de los momentos tensos entre ambos fue cuando el presidente Gustavo Petro solicitó que se verificara si los llamados “cupos indicativos” estaban siendo entregados a los mismos políticos de siempre.
«Recuerdo esa situación. Era diciembre de 2023, en una reunión de planificación estratégica con todo el gabinete y algunos directores de entidades. En ese momento, el presidente afirmó: ‘En gobiernos anteriores, los cupos se repartían entre los amigos de los políticos, pero en mi gobierno eso no sucede. Si alguien tiene conocimiento de que esto está ocurriendo, debe informármelo, porque no lo vamos a permitir’”, dijo Reyes.
“Cuando el presidente pidió señalar cualquier irregularidad, levanté la mano y mencioné un nombre: Adriana Ramírez, asesora del ministro Ricardo Bonilla”, agregó.
Sobre los problemas que tuvo con otros funcionarios por no haber entregado puestos clave dentro de la DIAN, Reyes aseveró que “Hubo ‘ofensas imperdonables’ para algunos sectores políticos, entre ellas no haber cedido el control de las direcciones de aduanas ni haber repartido los 10.000 puestos adicionales creados en la DIAN”.
Reyes también dijo que su gestión en la DIAN estuvo afectada por el Ministerio de Hacienda con una campaña de desprestigio.
“Si analizamos la historia fiscal de Colombia, veremos que el recaudo de 2024 fue el segundo más alto de la historia. Comparado con 2023, que tuvo el mayor recaudo registrado, es natural que haya una reducción. Existen razones para ello: la reforma tributaria fue recortada a la mitad y hubo factores políticos que influyeron en la caída”, explicó Reyes en la entrevista.
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También indicó que “el recaudo en términos reales fue el más alto de la historia, al igual que el recaudo bruto como porcentaje del PIB, un indicador clave de desempeño fiscal. Entonces, ¿cómo se convierte una historia de buena gestión en una de mala gestión? Se establecen metas de recaudo poco realistas y, cuando no se cumplen, se usa como argumento para desacreditar la administración”.
De igual forma, añadió: “La única explicación posible es que el ministro de Hacienda estaba más enfocado en apartar al director de la DIAN que en garantizar el recaudo tributario. Parece que prefirió dejar que la meta no se cumpliera con tal de que yo quedara en una posición desfavorable”.
Pero, Reyes también habló de otro movimiento de Bonilla como ministro. Aseguró que este dio el aval a una propuesta de varios congresistas de las comisiones económicas para trasladar $200.000 millones de la DIAN a la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) en la adición presupuestal de 2023.
Lo grave del asunto es que dicho asunto coincidió con la noticia del escándalo de corrupción dentro de la Unidad.