BOGOTÁ. La Superintendencia de Salud impuso una medida cautelar contra Audifarma por aparente desabastecimiento de medicamentos. Se trata de la segunda vez que el ente de control impone una medida administrativa en contra del gestor farmacéutico Audifarma, ya que la primera, de tipo sancionatorio, fue notificada el pasado mes de febrero.
Así lo informó la Supersalud este martes en un comunicado, aseverando que “la medida se toma luego de múltiples situaciones que se vienen presentando con este gestor, entre las cuales se encuentra un completo desabastecimiento de medicamentos en algunos puntos de dispensación, como es el caso de Quibdó, Chocó, lo cual fue corroborado en visita de inspección por parte del Superintendente Nacional de Salud, Giovanny Rubiano García y su equipo de colaboradores el pasado 8 de marzo de 2025, pese a que para este municipio, el contrato con Nueva EPS está vigente”.
Agrega la entidad que durante la visita, se identificó un desabastecimiento de inventario de medicamentos en las estanterías, “algunos de ellos tan básicos como el Acetaminofén, como otros de alto costo para tratamiento de cáncer. En diálogo con usuarios de ese punto, se pudo constatar que algunos afiliados registran medicamentos pendientes de entrega desde el mes de diciembre de 2024″.
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Por ello, resolvió la Superintendencia imponer “medida cautelar de cesación provisional de las acciones que ponen en riesgo la vida o la integridad física de los afiliados al Sistema General de Seguridad Social en Salud por intermedio de la Nueva EPS, adoptando los correctivos necesarios que garanticen la dispensación de tecnologías en salud de forma oportuna, continua y de calidad en garantía del derecho fundamental a la salud de los usuarios”.
Estas, se lee, se deben materializar con acciones, tales como la suspensión de las acciones de cierre de los establecimientos farmacéuticos que prestan el servicio de dispensación de tecnologías en salud a los usuarios de la Nueva EPS por el término de dos meses, prorrogables por un período igual, “hasta tanto se demuestre que tales decisiones administrativas y civiles no vulneran el derecho fundamental a la salud de las personas”.
Así mismo, realizar la gestión necesaria y dar solución a la entrega de tecnologías en salud que se encuentren pendientes al momento del cierre, previo al desmonte efectivo de los establecimientos farmacéuticos definidos para el proceso de dispensación a los usuarios de la Nueva EPS.
“Informar a la Superintendencia Delegada para Operadores Logísticos de Tecnologías en Salud y Gestores Farmacéuticos por cada cierre de establecimiento farmacéutico que se realice y, previo a este, enviar a los correos de la Superintendencia Nacional de Salud previstos en el presente acto, con copia a la Nueva EPS para que adelante las gestiones necesarias para cumplir con sus obligaciones de aseguramiento”, indica el comunicado.