El trabajo final de Stephen Hawking, en el que aborda cuestiones que van de la existencia de Dios a la posibilidad de viajar en el tiempo, fue presentado el lunes por sus hijos, que ayudaron a completar el libro tras la muerte del icónico astrofísico británico.
A Hawking siempre le preguntaban las mismas cosas, así que el año pasado comenzó a trabajar en 'Breves respuestas a las grandes preguntas', pero no logró terminarlo antes de fallecer en marzo a los 76 años.
Su trabajo ha sido completado por la familia del físico teórico y sus colegas académicos, con material extraído de su vasto archivo personal.
'Hay una serie de preguntas que se le hacían regularmente', explicó su hija Lucy Hawking durante la presentación en el Museo de Ciencias de Londres.
Y este libro fue el intento de 'reunir las respuestas más definitivas, claras y auténticas que dio'.