El dos de septiembre cumplió la comunidad unilibrista de Barranquilla cincuenta años del inicio de su ilustre facultad de medicina, la primera en ser fundada en la ciudad.
He tenido la oportunidad de leer un escrito del Doctor Teobaldo Coronado en el que narra, como testigo vivo de este suceso, sus impresiones personales y pude apreciar el valor de su contenido. Es un instrumento valiosísimo para quien desee profundizar sobre las circunstancias o hechos que dieron orígenes de cómo se creó la facultad de medicina, de muchísimo valor para amantes de la historia, que vivimos buena parte de la época narrada, por eso quiero resaltarlo.
El artículo es la expresión de una conmemoración, en donde se recuerda fechas, se honra a ilustres fundadores, docentes y alumnos, situaciones relevantes en la historia de ese evento y en la vida de la facultad de medicina. A través de él, podemos reflexionar sobre nuestro pasado, y mantener vivos los recuerdos que son significativos para los unilibristas. Nos ofrece la oportunidad de mantener viva nuestra historia y valorar el legado que nos han dejado aquellos que vinieron antes que nosotros. Nos permite conectarnos con nuestras raíces y fortalecer nuestra identidad como individuos y como comunidad unilibrista. En este sentido, el artículo es una herramienta para preservar nuestra cultura, y promover la unidad y el sentido de pertenencia con nuestra alma mater.
En el ameno escrito desfila multitud de nombres, por limitaciones de espacio no los pongo. De muchos de esos personajes mencionados conocí sus rostros; me son familiares, por eso la lectura del artículo me trajo gratos recuerdos.
Felicito al Doctor Teobaldo por recordar, celebrar y honrar lo que es valioso y digno de ser recordado de nuestra institución.
Agustín Guerrero Salcedo
