Isabel Lora y su hija Noelma Flórez Lora, dos cartageneras católicas que acuden tradicionalmente a la parroquia de su barrio, vieron por primera vez la misa por televisión.
Sentadas en su casa del barrio Villa Rosita y rodeada por otros miembros de la familia, se sentaron este domingo en la sala para para escuchar la palabra a distancia, como medida para prevenir el coronavirus.
'Tenemos la posibilidad de ir a la Iglesia Inmaculada Concepción que nos queda muy cercan pero el arzobispo nos recomendó conectarnos a Facebook o Instagram y no ir a la parroquia', dijo Noelma, al referirse a la decisión de la Arquidiócesis de Cartagena de no permitir más de 50 personas en los diferentes oficios religiosos.
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Para Isabel, una abuela de 87 años que usa tapabocas para evitar posible contacto en la ciudad que ya reporta tres casos positivos de coronavirus, reconoce que: 'Uno se siente raro, pero hay que respetar lo que nos recomienda Monseñor'.
