Compartir:

Ocho meses y once días después de haber firmado el acuerdo con el Gobierno Nacional en el Centro de Convenciones Julio César Turbay Ayala de Cartagena, dos miembros de las Farc vuelven a esta capital a hablar de paz.

Guillermo Torres, conocido como Julián Conrado, junto a su compañero Aldemar Altamiranda, otro miembro de las Farc, comenzaron un recorrido que los llevó a la Universidad de Cartagena donde hablaron del proceso de paz con los estudiantes del Alma Mater.

Armado con su guitarra, el 'Cantante de la Paz', el turbaquero Guillermo Torres, manifestó que llegó el momento de cantarle a la paz y dejar atrás la discordia de la que tanto, según él, habla la oposición de este proceso.

Torres no desconoció en ningún momento que tuviera aspiraciones políticas y, sostuvo que esto se concentra en la necesidad de resolver los problemas que afronta el pueblo como es la educación, la falta de empleo, entre otros.

'El termino de reinsertado no es que me agrade mucho porque yo nunca me he alejado del pueblo, no he dejado de cantar por ellos y para ellos. No he dejado de ser un hijo del pueblo. Lo único grande que hay en este momento es que existe la posibilidad de implementar unos acuerdos de La Habana en donde va a salir la violencia de la política', dijo Torres.

Ahora, según el exguerrillero, se puede hacer política civilizadamente y sin que exista la posibilidad de que, en el que se diga algo contrario al establecimiento, se atente o se eliminen a las personas. 'Mi aspiración es ayudar al pueblo a que tenga un mejor vivir'.

Guillermo Torres precisó que, en ningún momento dejará de ser Julián Conrado, pues con este último nombre convivió durante más de 30 años. 'Soy Guillermo Torres y Julián Conrado, dos personas y un solo cantor verdadero'.

Frente a los cuestionamientos hechos por parte del Senador Araújo del Centro Democrático, el exsubversivo manifestó que hace parte de una estrategia o un debate político en el que infortunadamente tendrán que caer. 'Yo no tengo nada que ver con Chambacú', manifestó de manera jocosa Torres refiriéndose a los líos, que en su momento, la familia Araújo tuvo con relación a estos predios.

Torres manifestó que existe la necesidad de responder con la paz e invitó a la oposición a meterse en el cuento y sintonizarse con la paz, la reconciliación y el perdón. 'Estamos en el tiempo de la búsqueda de una paz estable y verdadera. Debemos pensar que una persona que se ama así misma, a sus hijos, nietos y bisnietos no puede estar deseando más violencia y corrupción en este país'.

En las Farc, aseguró Torres, se está pensando ya en la dejación de armas y más aporte del que está haciendo la insurgencia en aras de que Colombia tenga una paz estable y duradera, no podemos hacer. El mensaje para Araújo fue que se meta en el cuento de la paz y que desarme el corazón, que desarme el alma. 'Que venga a disfrutar de este proceso que estamos armando todos los colombianos'.

Recuerdos de Turbaco

En torno a sus visitas clandestinas a Turbaco, su tierra natal, Torres sostuvo que hay mucho mito en torno a esta situación. Recordó que en el año 85 estuvo de manera clandestina en su pueblo como miembro de la Unión Patriotica.

'En ese momento estaba dentro de los acuerdos de ese momento y yo decidí ir a hacer una visita familiar sin armas. Cuando de pronto se formó un 'bololó' de parranda bien bonito donde todos llegaron a saludarme. Uno con una gallina debajo del brazo, otro con una botella de tres esquinas, en fin. Lo que dijeron en su momento era que allí se estaba conspirando y que se tenían armas'.

Luego de esto, mandaron de Cartagena, recuerda Conrado medio batallón de la Infantería para capturarlo. El pueblo entonces lo ayudó para poder salir disfrazado de monja montado en un bus. 'Me considero amigo de todos los religiosos que son creyentes y de buena fe porque hay unos tienes a Dios en la lengua y el diablo en el corazón'.

Torres expresó que aspira volver a vivir a Turbaco y tener una vida normal. 'Esta ñapa que me ha dado la vida quisiera vivirla en las calles de mi pueblo. Hay tantas cosas que hace en Colombia que esto no lo va dejar a uno. En otros países quieren escuchar el canto mío. Pero voy a pasarme en Turbaco unos días'.

Quiere volver a grabar

Torres sostuvo que su gran anhelo es volver a los estudios de grabación con una agrupación propia que se llame posiblemente 'Sin tanto perendengue'. En su propuesta, dice, que tiene un anhelo de darle un reconocimiento a los acordeoneros de renombre como Alfredo Gutiérrez quien fue el primero que le grabó dos canciones.

De igual forma, dijo el exguerrillero, que desea invitar a un acordeonero de la Sabana a otro de La Guajira, con el fin de escuchar los distintos matices del acordeón colombiano que es muy rico. Torres precisó que renunció a su éxito como cantante por una lucha revolucionaria con la que, de igual forma, aspira a dejar una semilla sembrada y que de buenos frutos. 'El amor por los demás es lo que lo lleva a uno a esta lucha que no ha parado'.

Apoyo a quien respalde el acuerdo

Por su parte, Aldemar Altamiranda, miembro por 38 años del grupo subversivo de las Farc comentó que quien respalde al acuerdo de La Habana será, según él, quien tenga el apoyo, no solo de los miembros reinsertados del grupo subversivo, sino de todo un pueblo que anhela la paz.

'La paz está consagrada en esas 310 página del acuerdo. Allí contemplado el deseo de los colombianos por vivir con la tranquilidad y la armonía', dijo Altamiranda quien señaló además que esta pedagogía por la paz también está contemplada en las 26 zonas veredales del país y es mucha la gente de las Farc que viene llegando. 'A la gente le interesa lo que dicen los acuerdos y esto es fundamental para el futuro del país pues esto debe traer beneficios para Colombia'.

Con relación a las declaraciones del Fiscal General de la Nación, Néstor Humberto Martínez, Altamiranda sostuvo que esa inquietud fue respondida por el presidente de la República Juan Manuel Santos, cuando, según Altamiranda, el mandatario había confirmado que había sido ministro de defensa y durante dos años estuvo persiguiendo los bienes de las Farc y no los había podido encontrar.

'Aquí están todas las campañas de difamación para las Farc para torpedear este proceso. Nos estamos abriendo al pueblo y estamos adelantando la reconciliación de cara al pueblo', sostuvo quien añadió que ya se llevan seis años en una lucha para que se vaya decantando la situación.