Compartir:

La construcción de la nueva plaza comercial de la Serrezuela, en el barrio San Diego, en la zona histórica de la ciudad, está a solo cinco pasos de un tramo de las murallas, que es patrimonio de la Humanidad, decretado por la Unesco.

Los trabajos de ingeniería que se realizan para reconstruir la plaza, que era de madera, y convertirla en un centro comercial moderno, con locales, zonas de recreación y restaurantes, alertó el Concejo.

El concejal David Múnera, del Polo Democrático, dijo que los asalta la preocupación de que estas obras puedan causar daños a lo que llamó, 'la joya de la corona, como son las murallas de Cartagena'.

La prevención es por causas distintas. Entre ellas un caso en particular. La construcción de un pequeño hotel boutique al lado de La Serrezuela, que no está contemplada en esta, pero que se realiza casi al tiempo y ha causado problemas en casas vecinas del sector, lo que obligó a sus habitantes a mudarse debido a la caída de paredes y resquebrajamiento de suelos de sus inmuebles.

La construcción de las bases subterráneas del hotel boutique ha provocado daños en las viviendas vecinas y un enfrentamiento entre vecinos y representantes o dueños del proyecto. Incluso, estas diferencias se dirimen en los tribunales de justicia desde el año pasado.

Los constructores de La Serrezuela, por su parte, dijeron que no hay qué temer. Aseguraron que su proyecto fue diseñado y se está ejecutando 'no sólo bajo los más altos estándares técnicos, sino que por personas con vasta experiencia y ampliamente reconocidas en escenarios y proyectos similares'.

Aseguraron en un comunicado a la opinión pública que 'el proceso constructivo está diseñado de tal forma que la muralla no se vea afectada de ninguna manera. Es importante aclarar que desde el inicio de la obra se ha venido realizando un monitoreo permanente para garantizar la estabilidad de las murallas'. Sin embargo, los concejales temen que la construcción de un parqueadero subterréneo y los trabajos que se están haciendo en La Serrezuela con grúas y excavadoras terminen por afectar a las murallas centenarias.El concejal Luis Gutiérrez dijo que las autoridades distritales han sido laxas con esta obra porque no lo que se ha hecho no es una restauración, sino una nueva construcción.

Su colega Américo Mendoza sostuvo que La Serrezuela, que fue considerado un monumento emblemático de la ciudad, no debió ser destruido como se hizo y pidió investigar a los funcionarios que dieron el permiso. El jefe de la División de Patrimonio del Instituto de Patrimonio y Cultura, IPC, Alfonso Cabrera, dijo que la autorización de la reconstrucción de La Serrezuela se aprobó en el 2009 y que el viejo coso taurino de madera se pudrió y que por eso se reconstruirá y se harán obras nuevas. Sobre el peligro que teme el Concejo con respecto a las murallas, dijo que las obras, si se hacen correctamente no habrá problemas.