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Milan Piqué Mebarak llegó con los pies descalzos al colegio que su madre, la consagrada cantante Shakira, inauguró ayer en la tarde en la Loma del Peyé.

Y se fue de Cartagena, entrada la noche, con su pasaporte colombiano entre las manos, en su primera visita a este país, del que la artista dijo que es también su patria.

En la apretada agenda de su paso por este puerto colonial del Caribe, la ganadora del premio Grammy en varias oportunidades habló de todo, incluso hasta de política, pero sin perder el buen humor que siempre la acompañó.

Una pequeña admiradora de Shakira le agradeció a la cantante por todo lo que hace con su fundación Pies Descalzos.

Dijo: 'estamos mal de concejales' y sonrió cuando se le preguntó sobre la propuesta del integrante del Concejo de Bogotá Marco Fidel Ramírez de prohibir su más reciente video con Rihanna (ver nota Sobre los celos de Gerard, el video con Rihanna y un poco de política).

Shakira llegó ayer entre las penumbras del nuevo día. Entre cuatro y cinco de la madrugada aterrizó su aeronave en el aeropuerto de Crespo, procedente de Los Ángeles, EEUU. Una vez bajó de su avión abordó una camioneta que la esperaba en la pista con el motor encendido.

Sara López, una joven que hizo parte del grupo de unas 40 fanáticas que vinieron desde varias ciudades del país y que esperaron desde las dos de la mañana en el aeropuerto Rafael Núñez a la cantante, dijo que esta llegó con blusa y pantalón negro; lució una boina del mismo color y entre sus brazos llevaba al pequeño Milan.

De allí se dirigió al hotel Santa Clara, en la ciudad vieja, de donde partió pasadas las cinco de la tarde a la Loma del Peyé, en las estribaciones del cerro de La Popa, a entregar el megacolegio que construyó su fundación Pies Descalzos, con el apoyo de la Alcaldía de Cartagena y otras entidades privadas.

Shakira estuvo acompañada en el corte de la cinta de María Victoria Donado, Antonio Celia, María Clemencia Rodríguez, primera dama del país, y María Fernanda Campo, ministra de Educación.

La artista dijo en el colegio –que tiene capacidad para 1.400 estudiantes de primaria y secundaria– que era un día muy feliz para ella y para los niños que iniciarán este lunes 3 de marzo su educación formal.

Sostuvo que era una institución para que los muchachos de la zona crecieran cerca de sus ideales, de sus sueños y alejados de las drogas.

Pidió al sector privado y al Gobierno seguir trabajando en alianzas para entregar una educación de calidad para la juventud del país.

Dijo que este es un derecho fundamental y que su gran sueño es que ningún niño se quede sin gozar de ser formado en una institución digna.

La primera dama de la Nación, María Clemencia Rodríguez de Santos, dijo, por su parte, que de este megacolegio iba a salir una generación de colombianos preparados para gozar de tiempos de paz, como no le había pasado a muchos de los presentes.

Parafraseó una estrofa de una canción de Shakira y dijo que 'un día después de la tormenta sale el sol y este colegio es ese sol que iluminará a la Loma del Peyé'.

En las afueras del nuevo complejo educativo, cientos de niños y niñas, mujeres y hombres se apiñaron en las aceras, se montaron en los techos y los árboles para ver a la barranquillera, a la que le gritaban por su nombre y le pedían que saliera.

Shakira correspondió a ese cariño y les regaló sonrisas y besos tirados desde la entrada del colegio, lo que generó histerias colectivas entre los vecinos de este sector de gentes humildes.

Entrada la noche se fue al hotel, donde feliz mostró a su hijo con su nuevo pasaporte colombiano.