La operación de la refinería y la ejecución de estas inversiones generan 3.000 puestos de trabajo que en su mayoría son mano de obra local que contribuyen a la reactivación económica de Santander y no se ha detenido ante las cifras más altas de contagios por covid-19.
Prueba de ello son los 16 parques eólicos que se están construyendo en el departamento y las dos líneas de transmisión que nos permitirán llevar la energía del viento por toda Colombia. Estos proyectos no sólo representan inversiones por más de $10 billones y 11.700 oportunidades de empleo para toda la región Caribe, sino que son clave para seguir consolidando la transición energética de Colombia y la diversificación de nuestra matriz eléctrica.