“El camino hacia una Barranquilla más segura, libre de grupos criminales y de pandillas comienza con cambio en las normas que existen en la ciudad y que protegen de cierta manera a los delincuentes”.
Bajo esta premisa, el general Herbert Benavidez, comandante de la Policía Metropolitana de Barranquilla, precisó, en medio del segundo Foro Caribe de Seguridad Ciudadana, que se llevó a cabo este martes en la capital del Atlántico, las acciones que hacen falta para mejorar la seguridad en el territorio.
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“Si hablamos de estar a la altura para enfrentar los delitos que se cometen en la ciudad, yo planteo que hay que hacer una actualización de las normas teniendo en cuenta que muchas veces se facilita, de cierta manera, algunas prácticas criminales. Un ejemplo claro son los vencimientos de términos que sirven para cobijar a muchos criminales por fuera de las cárceles y darles detención domiciliaria. Entonces si la normativa tiene fisuras siempre va estar la oportunidad de seguir delinquiendo a pesar de las medidas preventivas”, explicó.
Agregó, además, que es importante tener en cuenta el tema del control sobre las cárceles de la ciudad.
“Queremos trabajar con el Inpec precisamente para tener la claridad frente a dónde están estos delincuentes y también ejercer cierto control frente a eso, pero también en seguir trabajando y participando y ser propositivos en aras de que estas personas, que tienen estos niveles de peligrosidad, realmente estén dentro de las cárceles”, comentó.
De igual manera, mencionó que el tema del hacinamiento carcelario es un tema que es de conocimiento de toda la ciudadanía. “Esperaríamos que obviamente desde las políticas criminales se logre obviamente subsanar en algún momento esta situación”.
También, el general Benavidez fue enfático en que los jóvenes se están convirtiendo en los componentes principales de las pandillas de la ciudad.
“Hay fenómenos sociales como el barrismo y las pandillas que empiezan por un tema de barrios; entonces, estas actividades se vuelven un caldo de cultivo para ser reclutadores de jóvenes. Varios de los cabecillas que existen actualmente iniciaron en este ejercicio de las pandillas; entonces, hay que seguir identificando estos grupos sociales”, dijo.
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