El pasado viernes 6 de diciembre, en horas de la tarde, un operador de aseo de la empresa Aqualia agredió a una madre y a su hija a raíz de un reclamo hecho por demoras en la recolección de basuras en un sector de Villa Olímpica, en el municipio de Galapa.
Es de anotar que, desde algunas semanas atrás, dicho sector ha vivido una contingencia sanitaria, porque se han presentado fallas en la recolección de los residuos sólidos.
Le puede interesar: Residente de Villa Olímpica es agredida por funcionario de Aqualia tras reclamar la acumulación de basura en el sector
Esto ha desatado la indignación entre los residentes de Villa Olímpica, ya que la basura está generando malos olores y la presencia de roedores. Frente a la problemática, Aqualia dispuso de un camión adicional para atender las labores.
Se pronunció una de las víctimas
El caso de la agresión ocurrió a la 1:00 de la tarde del sábado, cuando estas dos mujeres observaron que el camión había dejado dos bolsas de basura sin recoger. Como consecuencia, las habitantes decidieron llevarlas a la esquina y les reclamaron que no las habían tomado.
De acuerdo con una de las víctimas, los funcionarios les dijeron que ya habían pasado por ese tramo y que no iban a volver a transitar por ahí. De esta forma, le sugirieron que llevaran la basura donde ellos estaban ubicados.
“Mi mamá, al ver la respuesta de ellos, saca el celular. Al momento en que mi mamá empieza a grabar, el señor del camión de basura se baja. Viene hacia nosotros a decirnos que ellos ya habían pasado por ahí y que no iban a volver a pasar. Nosotros le reclamamos que ellos tienen el deber de recoger la basura”, relató una de las afectadas.
A partir de ahí, la discusión escaló y se empezaron a intercambiar insultos entre ellos. Esta controversia terminó en fuertes golpes propinados por parte del operario, lo que afectó la integridad física de ambas mujeres, estando la hija en estado de embarazo.
“Hay una parte donde nos ofende verbalmente y nos dice un montón de malas palabras. (...) Mi mamá le da una respuesta al insulto que recibió. (...) Él ya se iba a montar al camión, pero se devuelve corriendo y empuja a mi mamá y la zarandea. El celular sale volando. Yo, al ver que le pegaron a mi mamá y que se le viene encima otra vez, me meto en la mitad. Y enseguida me pegó un puño a mí en el ojo. Como me pegó tan duro, yo me tapé la cara”, contó la mujer, quien añadió que al hombre no le importó que estuviera embarazada.
“Los vecinos fueron los que nos ayudaron a quitárnoslo de encima. Y él empezó entonces a correr hacia el camión y se montó corriendo porque vio que la gente estaba saliendo”, expresó entre lágrimas.
Deficiencias en los procedimientos
Continuando con el relato, la mujer, quien no dio a conocer su identidad por razones de seguridad, aseguró que autoridades le vulneraron todos los derechos frente a la violencia de género. Indicó que, cuando la Policía llegó, no escucharon completamente su versión.
Luego de dicho procedimiento, la afectada pudo ir a la clínica para que le atendieran las heridas, así como revisar que el bebé se encontrara en buen estado; sin embargo, el monitoreo en el centro de salud no pudo completarse, porque los policías le indicaron que se la iban a llevar capturada, ya que el presunto victimario había dicho que fue ella la que lo agredió.
Además: Durante temporada navideña, Transmetro habilita rutas por los sitios emblemáticos de Barranquilla
“Revisando mi historia clínica, veo que en mi historia no dice cómo estaba la bebé. No está el registro de la nota que debieron poner sobre la agresión. Todo el día en la clínica y simplemente pusieron que tenía un golpe en el ojo y ya. Me hicieron un tacto; el doctor me dijo que ya estaba a dos días de dar a luz, pero no me explicó cómo estaba mi bebé. Ni siquiera me tomaron la presión, ni el oxígeno, nada”, recordó.

















