En un esfuerzo por fortalecer la independencia económica de las mujeres atlanticenses, la Gobernación del Atlántico, a través de la Secretaría de la Mujer y Equidad de Género, puso en marcha la segunda versión del proyecto “Yo Emprendo, Yo Facturo en la Ruta 23”, una iniciativa que llega con fuerza a los 22 municipios del departamento, beneficiando directamente a 150 mujeres.
Este programa, desarrollado en alianza con Actuar Famiempresas, busca brindar herramientas concretas para que las participantes puedan iniciar o fortalecer sus propios emprendimientos. La apuesta: empoderarlas económicamente para transformar sus vidas y las de sus familias.
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La secretaria de la Mujer, María Lourdes Dávila Márquez, destacó que este año el proyecto vuelve recargado con más formación práctica, insumos y oportunidades.
“Fue un éxito el año pasado, y ahora ampliamos la cobertura. El objetivo es claro: que las mujeres tengan un oficio que les brinde autonomía, ingresos y dignidad. Queremos cerrar la brecha económica desde los territorios”, expresó.
Las mujeres recibirán formación en áreas como estilismo capilar, embellecimiento de uñas, maquillaje social y artístico, y decoración de eventos.
Además, se les entregará un kit completo con herramientas e insumos para arrancar sus iniciativas productivas.
Cada módulo está diseñado con un enfoque práctico, con temáticas como bioseguridad, tendencias de mercado, y técnicas específicas adaptadas a la demanda local.
En palabras de la primera gestora del Atlántico, Liliana Borrero, esta ruta de capacitación no solo es una apuesta económica, sino también una barrera contra la violencia:
“Una mujer dueña de sí, especialmente desde el punto de vista económico, difícilmente permitirá la violencia. Por eso este proyecto es una herramienta de protección y libertad”.
“Yo Emprendo, Yo Facturo en la Ruta 23” se alinea con el Plan de Desarrollo 2024-2027 ‘Atlántico para el Mundo’, que destina más del 62 % de sus inversiones al desarrollo social.
En este sentido, se convierte en una política pública que impacta de forma directa el bienestar de las mujeres y de las comunidades.
“Estamos seguras de que este proyecto transformará la vida de muchas mujeres. No solo porque ganarán independencia económica, sino porque les da la oportunidad de romper ciclos y reescribir sus historias con orgullo”, puntualizó Dávila Márquez.