El Atlántico se ha puesto una misión para el año 2027. Disminuir los índices de prevalencia de inseguridad alimentaria y pobreza en el departamento. Así lo dio a conocer el gobernador Eduardo Verano este viernes, en medio del acto de firma del memorando de entendimiento por la reducción del hambre, que se llevó a cabo en el Cubo de Cristal, de la Plaza de la Paz.
De acuerdo con el mandatario, se proyecta invertir $500 millones, en articulación con la Cámara de Comercio de Barranquilla, para un fondo que impulsará el desarrollo social en las comunidades más vulnerables del departamento.
“Este fondo administrará y canalizará recursos públicos y privados hacia iniciativas que transformen el territorio, basadas en una estrategia definida y enmarcada en Misión Atlántico. Los aportes serán destinados a financiar proyectos de alto impacto mediante acciones como la construcción de comedores comunitarios, así como la creación de un centro de nutrición y cuidado integral para la familia, entre otras”, comentó.
De esta manera, mencionó también que “desde la estrategia Misión Atlántico se tiene proyectado una inversión de $4.4 billones que está enfocada en educación, capital social, en empoderamiento de la mujer y población vulnerable”.
Adicionalmente, Verano señaló que otra de las estrategias principales para erradicar el hambre es el Programa de Alimentación Escolar. “Hemos fortalecido la calidad educativa con inversiones más y mejores colegios, dotando a nuestros niños de alimentación escolar y ambientes de aprendizaje más sanos. Hoy, el Plan de Alimentación Escolar, el PAE, cobija a más de 46.000 alumnos de nuestras instituciones educativas. Nuestro enfoque de desarrollo humano no es exclusivo para niños. Además, contamos con programas de atención integral a las familias a través de distintos programas”.
De igual manera, Manuel Fernández, presidente de la Cámara de Comercio de Barranquilla, a través de su delegada la vicepresidenta, Mireylle Julliard, señaló que esta alianza público-privada permitirá crear un ecosistema de innovación, emprendimiento y progreso, promoviendo proyectos estratégicos basados en el fortalecimiento de las economías populares, la educación, ciencia y tecnología.
“Nos unimos con compromiso y determinación a Misión Atlántico, una estrategia alineada con los Objetivos de Desarrollo Sostenible: Fin de la Pobreza y Hambre Cero. Destinaremos una inversión significativa para impulsar la economía local y fortalecer el tejido empresarial de seis municipios priorizados: Repelón, Santa Lucía, Candelaria, Campo de la Cruz, Suan y Manatí. Nuestro rol estará enfocado en promover inversión social desde el sector empresarial, brindar capacitación y crear espacios de conexión para el desarrollo de estas comunidades”, aseveró.
Por otro lado, la empresa Fruselva, especializada en alimentación y distribución infantil resaltó que se ha invertido cerca de USD 200 mil para programas de seguridad alimentaria en el departamento.
“Nosotros en Barranquilla tenemos un laboratorio de innovación que nos va a permitir aportar a todos los aliados ese desarrollo de forma que nos conlleve a esa seguridad alimentaria. Con el gobernador Verano hemos trabajado propuestas de frutas y verduras que transformamos en hábitos de vida saludables, por lo cual el programa corporativo va muy alineado con lo que se tiene en el sector público”, dijo.
Mientras tanto, Nils Grede, director del programa Mundial de Alimentos en Colombia, aseguró que se está trabajando para vincular los programas de alimentación con la distribución de productos locales.
“En el Atlántico hay una gran oportunidad porque podemos vincular el alimento que se consume desde los productores locales, escuchamos que cerca de un 80% de los alimentos que se venden en la Central de Abastos son de fuera del departamento, entonces tenemos que ayudar y financiar al productor para que produzca más y que surta a su mismo departamento, estamos trabajando en crear un nuevo fondo para esto, y muy pronto empezará la recaudación”, comentó.
Mientras que Fabiola Elías, gerente de Granabastos, resaltó que “desde la central de abastos tenemos preparada una gran donatón de alimentos con el respaldo activo de nuestros comerciantes, un esfuerzo solidario que busca impactar, significativamente, a las familias de nuestra periferia. De igual forma, con el apoyo de la Universidad del Atlántico ya hemos venido adelantando la caracterización nutricional de niños en comunidades vecinas, reafirmando nuestra apuesta por entornos alimentarios más saludables y justos”.