La celebración de Halloween suele ir acompañada de un alto consumo de dulces, lo que puede afectar la salud bucal, especialmente en los niños. Los especialistas advierten sobre los riesgos que el azúcar representa para los dientes y encías, por lo que ofrecen recomendaciones para disfrutar de la ocasión sin comprometer la salud.
La odontóloga y rehabilitadora oral Angélica Melo Suescún manifestó que “cuando consumimos dulces, las bacterias presentes en la boca fermentan el azúcar y generan ácidos que atacan el esmalte dental, debilitándose con el tiempo. Esto da lugar a caries, pero el problema no termina ahí. Si no se trata, la infección puede avanzar hacia las raíces del diente e incluso causar abscesos”.
El exceso de consumo de azucares puede traer consigo consecuencias como gingivitis y periodontitis, mal aliento crónico y un mayor riesgo de infecciones sistémicas.
Diana Marcela Ramírez Castaño, cirujana maxilofacial, indicó que “las infecciones bucales no tratadas pueden diseminarse a otras partes del cuerpo, afectando el sistema respiratorio y cardiovascular”.
Los niños son los más afectados cuando se habla de consumo de dulces y bebidas azucaradas, ya que estos tienden a desarrollar caries rápidamente. La falta de una correcta higiene bucal y el frecuente consumo de dulces, producen una combinación riesgosa que además de afectar su salud dental, afecta su rendimiento escolar causando dolor en los dientes los cuales dificultan su concentración.
Estas son algunas de las medidas que sugieren los especialistas:
Cepillado luego de comer dulces: Es fundamental que tanto niños como adultos se cepillen los dientes luego de consumir alimentos azucarados, usando hilo dental para eliminar cualquier residuo que fomente la placa bacteriana.
Moderar el consumo: Reducir la cantidad de dulces que se comen al día y buscar otras alternativas como frutas o frutos secos para minimizar el impacto del azúcar en la salud bucal.
Otras recomendaciones son: visitar al odontólogo y limpiarse los dientes antes de dormir. Especialistas afirman que con buenos hábitos de higiene y consumo moderado, es posible disfrutar de Halloween sin comprometer la salud dental.