El Ministerio de Transporte anunció una reglamentación que permite definir 'los nuevos criterios técnicos' para la instalación y operación de las fotomultas en las diferentes vías del país.
A través de un comunicado, el viceministro de Transporte, Alejandro Maya, informó que el proyecto pone en cintura las fotomultas para que se conviertan en lo que verdaderamente debe ser, 'una herramienta para contribuir con la seguridad vial y no en una caja registradora en favor de unos privados'.
De momento, el proyecto tendrá un período de socialización con los ciudadanos y se espera que para el 14 de enero de 2018 la norma esté sancionada para su entrada en funcionamiento.
Bases del proyecto. La construcción de este proyecto de resolución establece con cuatro componentes fundamentales para su nuevo funcionamiento.
Se trata, primeramente, de establecer 'un techo en el recaudo del privado', es decir que las fotomultas no podrán remunerar a la inversión privada con un porcentaje superior al 10% del recaudo.
Seguidamente, será la cartera de Transporte la que dé la autorización para la instalación de los dispositivos después de que la autoridad de tránsito 'presente un estudio de viabilidad técnica avalado por la Agencia Nacional de Seguridad Vial, en donde especifiquen los criterios de ubicación del dispositivo (tramos críticos, infraestructura, siniestralidad, caracterización de flujos)', explica Maya.
La norma plantea que teniendo en cuenta que los dispositivos serán instalados en lugares donde represente riesgo de accidente, 'su ubicación deberá contar con la señalización pertinente a mínimo 500 metros de distancia'.
La nueva reglamentación le da al ciudadano la opción de no pagar la multa, siempre y cuando demuestre que la señalización no tenía los requerimientos estipulados.
Destaca además que los aparatos deben estar debidamente calibrados.
Las concesiones de fotocomparendos que existen actualmente mantendrán sus porcentajes y solo será posible cambiarlos a través de demandas. Contarán con seis meses, hasta julio del próximo año, para adherir las nuevas reglas y recibir una autorización de funcionamiento. De no hacerlo en ese plazo, serán desmontadas.
A cargo de Construseñales
La empresa Construseñales S.A. maneja el cobro de las fotomultas en Barranquilla. El concesionario se encarga del amoblamiento urbano, que primero era para administrar el mobiliario y la señalización en la ciudad (2007 administración de Guillermo Hoenigsberg) y posteriormente, en 2010, le agregaron las fotomultas. En esa época el concesionario se ganaba el 50% y a la ciudad le ingresaba una cifra similar. La administración del alcalde Char (primer periodo) hizo una revisión del contrato con el concesionario y acordaron bajar a un 35% para ellos y 65% para el Distrito.
El valor actual para el concesionario es de un 31%.
