Compartir:

Colombia apunta a dar un paso para incluir a las fuentes de energías no convencionales a su matriz de generación energética, y el Gobierno se ha puesto un plazo de 12 meses para actualizar la normatividad vigente, planear, conectar, operar, medir la integración de los proyectos que sean complementario a los mecanismos existentes en el mercado de energía mayorista. 

Esta decisión de política pública y calificada como la 'revolución en el sector energético en la próxima década' por el Ministro de Minas, Germán Arce, es vista por expertos como la puerta que se abre para que el mercado tenga nuevos jugadores, se dinamice, haya una mejor eficiencia del precio y pueda gestionar riesgos climáticos como el Fenómeno de El Niño.  

El país ha sido impactado tanto económica como socialmente por el Fenómeno del Niño, el más reciente en 2016 que tuvo sus efectos en los costos de la energía eléctrica y con una subida 'significativa' en su valor. La energía limpia sería entonces una de las soluciones adecuadas para enfrentar estos fenómenos climáticos, según André Fraga, CEO del Grupo Renovatio, compañía con sede en Portugal.

Por ser un país dependiente del recurso hídrico, con una matriz hidráulica por encima del 60%, su posición geográfica cerca de la línea ecuatorial, tiene fenómenos de El Niño cada vez más seguido y más largos que estresan el sistema. 

'Si nosotros tenemos un componente de viento y uno de sol, cuando no tenemos agua habrá más energía generada de esas fuentes que compensan la menor energía del hidráulico. Para un industrial o para un distribuidor la visibilidad de precios es mucho más amplia porque no tiene que estar preocupado de si hay Niño o hay Niña', dijo Fraga en el marco del segundo Encuentro Internacional de Energías Renovables, organizado por el Consejo Mundial de Energía Renovable y la Asociación de Energías Renovables (SER) en Barranquilla.